La memoria a corto plazo del encarcelado líder del cartel de Sinaloa es cada vez menor y en la prisión en que está recluido sólo le están dando un cuarto de la pastilla ansiolítica que le prescribieron los médicos que lo visitan regularmente, dijo Delgado, abogada de Guzmán en la fronteriza Ciudad Juárez.
“Nos puso mucho énfasis en su estado de salud. Él dice que no atentaría contra sí mismo por sus dos hijas (pequeñas), pero hizo hincapié en que le ayudemos con su estado de salud”, afirmó luego de visitar al capo en la prisión.
Agregó que no le es posible decir que Guzmán “está confiado en que no vaya a ser extraditado próximamente, pero está tranquilo con el trabajo que estamos haciendo como representantes legales”.
La Procuraduría General de la República (PGR) de México informó el jueves último que fue notificada de resoluciones emitidas por un juzgado contra los amparos interpuestos por el capo para impedir su extradición a Estados Unidos.
La defensa del narcotraficante, que ha escapado en dos ocasiones de cárceles de máxima seguridad del país (2001 y 2015), confirmó el mismo día que recurrirá la decisión judicial.
El capo afronta en una corte de Texas, EE. UU., cargos por los delitos de asociación delictiva, contra la salud, delincuencia organizada, posesión de armas, homicidio y lavado de dinero.
Además, en una corte de California es acusado de asociación para importar y poseer con la intención de distribuir cocaína.