En las últimas cuatro décadas son incontables los periodistas, investigadores y extrabajadores de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (Nasa, en inglés) de Estados Unidos que han señalado a esa agencia de ocultar, manipular y falsear información referente a los verdaderos descubrimientos efectuados en la Luna.

Las fotografías tomadas por las misiones Apolo, los paseos lunares y algunos inconvenientes técnicos han sido revelados por investigadores.

Sin duda, lo más llamativo sería la presencia de estructuras artificiales que pudieron ser investigadas y fotografiadas por los astronautas durante su misión lunar, pero quedaron en secreto.

Durante el transcurso de los años, la Prensa ha recogido distintas informaciones sobre la supuesta existencia de construcciones sobre ese satélite, desde cúpulas de cristal, obeliscos, torres, puentes hasta enormes hangares de origen desconocido.

La información fue dada a conocer por extrabajadores de la Nasa, quienes afirman que han visto datos que se guardan celosamente. Se trata de fotos que se tomaron en la Luna cuando el Apolo 11 hizo su misión espacial en 1969.

Las versiones señalan que en esas imágenes logradas por los tripulantes se muestran restos humanos en la Luna, hecho que habría sido ocultado por razones desconocidas.

La Nasa dio la orden de eliminar todas las fotos tomadas por el astronauta Neil Armstrong —fallecido a los 82 años, el 25 de agosto del 2012—, pero un trabajador las conservó y las dio a conocer, según versiones de prensa.

Altos funcionarios de la Nasa despedidos dijeron el 30 de octubre del 2006 que el gobierno estadounidense ocultó información sobre vestigios de construcciones en el satélite de la Tierra, que se cree fueron edificadas por humanos.

Según el periódico ruso Komsomolskaya Pravda, esta información fue revelada durante una conferencia de prensa en Washington DC, convocada por Ken Johnston, director de la Sección de Conservación de Fotos del Laboratorio de la Nasa sobre la Luna, despedido el 23 de octubre del 2006, y el exasesor de la Nasa, Richard Hoagland, quienes aseguran que participaron en el proyecto Apolo y en la transmisión del alunizaje por la televisión en vivo y en directo.

Restos tecnológicos

Johnston informó que en 1970 astronautas estadounidenses vieron y registraron con cámaras fotográficas “vestigios de construcciones de antigüedad remota” en la Luna, donde fotografiaron algunos restos tecnológicos.

Al traer las imágenes a la Tierra, los astronautas las entregaron a Johnston, responsable de la conservación de fotos. La Nasa le ordenó destruirlas y, sin embargo, fueron secretamente conservadas por él.

Casi 40 años después, Johnston decidió publicar esas fotos que estremecerían al mundo. Al mismo tiempo, señaló a la Nasa de falsificación, pues todas las fotos oficialmente dadas a conocer pasaron por un tratamiento especial y, en particular, las del alunizaje.

Hoagland dijo que los astronautas también trajeron de regreso algunos objetos, cuyas tecnologías ya han sido utilizadas por Estados Unidos, Rusia, China, India y Japón. Esos países están llevando a cabo una nueva contienda por la Luna.

Estos enigmas sobre la Luna son objeto de investigaciones documentales por canales de prestigio de Estados Unidos.

Primer orbitador lunar

El primer orbitador lunar chino, Chang’e 1, fue lanzado el 24 de octubre del 2007 y entró en órbita lunar el 5 de noviembre de ese año.

La sonda operó hasta el 1 de marzo del 2009, cuando impactó intencionadamente contra la superficie lunar.

Los datos recopilados por Chang’e 1 fueron usados para crear un mapa de alta resolución en 3D de toda la superficie lunar, ayudando a la elección del lugar de alunizaje de Chang’e 3, que llegó el 14 de diciembre del 2013.

*CON INFORMACIÓN DE AGENCIAS EFE Y AP