La dueña de Spice fue ubicada en Albuquerque usando un microchip implantado en la gata.
Jennifer Brown, del Animal Refuge League, le dijo al periódico Portland Press Herald que habló con la dueña, quien le dijo que Spice se escapó cuando ella abrió la puerta para dar golosinas a niños en Halloween.
La dueña, que no quiso ser identificada, dijo que nunca ha estado en Maine y no conoce a nadie en el estado.
Spice, en tanto, sigue en Westbrook, porque su dueña no puede costearle el viaje en avión.