Los islamistas “se retiraron de las grandes ciudades para no quedar acorralados y tuvieron que retirarse no muy lejos de estas aglomeraciones”, añadió.
En lo referente al aspecto político de la crisis maliense y la perspectiva de la posguerra, Traoré estimó que “el único grupo con el que podemos prever negociaciones es el MLNA, a condición de que el MLNA renuncie a todas estas pretensiones territoriales”.
El MNLA, un grupo rebelde tuareg, renunció a su reivindicación de independencia en el norte de Malí, de donde Al Qaida en el Magreb Islámico (AQMI) y sus aliados, Ansar Dine (Defensores del Islam) y el Movimiento para la Unidad y la Yihad en África Occidental (MUYAO) les expulsaron en junio de 2012.
Traoré consideró que el presidente de Burkina Faso, Blaise Compaoré, mediador de África Occidental en la crisis maliense, se “equivoca” al pensar que se puede negociar con Ansar Dine, responsable de la ofensiva del 10 de enero hacia el sur del país que desencadenó la intervención del Ejército francés.
“Es evidente que Ansar Dine se descalificó, no se le puede elegir para dialogar a pesar de las posturas que algunos de ellos hayan decidido adoptar ahora”, afirmó Traoré en alusión Movimiento Islámico de Azawad (MIA), escindido de Ansar Dine.
Por otro lado, al menos dos soldados malienses murieron este jueves en la explosión de una mina al paso de su vehículo, entre las ciudades de Douentza y Hombori, en el norte de Malí, informó una fuente maliense de seguridad.
“Un vehículo del Ejército maliense pasó este jueves sobre una mina entre las localidades de Douentza y Hombori. Hay al menos dos muertos”, indicó esta fuente.
Francia informó este jueves que los siete rehenes franceses que los islamistas secuestraron en Níger y en Malí en 2011 y 2012 se encuentran probablemente en las montañas de la región de Kidal, en el extremo nordeste de este país, donde dos soldados malienses murieron en la explosión de una mina.
“Es probable” que los rehenes “estén en la región del macizo de Ifoghas en el norte de Kidal”, declaró a la emisora de radio France-Inter el ministro francés de Defensa, Jean-Yves Le Drian.
Durante la noche del martes al miércoles, el ejercito francés tomó posición en el aeropuerto de Kidal, ciudad que después de Gao y Tombuctú, recuperadas entre el 26 y el 29 de enero, era la última gran localidad del norte todavía en manos de grupos armados que ocupaban esta región desde hace cerca de diez meses.
“Las fuerzas francesas están en Kidal y tomaron el aeropuerto. Están a la espera de que, ellas y otras fuerzas africanas, puedan asegurar la ciudad”, afirmó Le Drian. Actualmente, unos tres mil 500 militares franceses están desplegados junto a unos dos mil soldados africanos.
Durante mucho tiempo, Kidal fue el bastión del grupo islamista Ansar Dine, dirigido por Iyad Ag Ghalym, un exrebelde tuareg. Sin embargo, el MIA afirmó hace poco que controlaba Kidal junto con los rebeldes tuaregs del MNLA.