García, en agradecimiento a lo recibido en Estados Unidos, decidió pintar una serie de coloridos retratos de seis presidentes del país, desde George Washington hasta Obama.
Esas obras ahora se exhiben en la Biblioteca Pública Belmar, en Lakewood (un suburbio al oeste de Denver) y luego se incorporarán a una exhibición itinerante que recorrerá varias escuelas de Colorado.
Tras concluir el retrato del actual mandatario en agosto pasado, García le envió una carta a Obama, incluyendo una reproducción de ese retrato.
“Es una manera de agradecerles a aquellos que han cambiado la historia, ya que esos cambios llevaron a la democracia y a la libertad de las que hoy disfrutamos“, escribió García en su carta al presidente.
Y agregó: “Le pido, en nombre de 11 millones de indocumentados, que por favor detenga las deportaciones injustificadas y que implemente cambios positivos por medio de una reforma inmigratoria“.
El pasado sábado, García recibió la repuesta presidencial. En esa misiva, el mandatario estadounidense afirma que “en la actualidad nuestro sistema de inmigración no funciona” y lamenta que “los líderes republicanos de la Cámara de Representantes se rehusaron a votar” a favor del proyecto de ley reforma inmigratoria de 2013.
El presidente también afirma que Estados Unidos “es y siempre será una nación de inmigrantes“, enfatizando que “somos estadounidenses por compartir el compromiso con la creencia de que todos somos creados iguales y de que todos deberíamos tener la oportunidad de hacer con nuestras vidas lo que queramos“.
García consideró que la carta presidencial “tiene un gran significado“, porque demuestra que “el Gobierno escucha las inquietudes y preocupaciones de sus ciudadanos“.
“Que el presidente de la nación más poderosa del mundo le responda a un inmigrante mexicano preocupado por otros inmigrantes mexicanos es algo increíble“, declaró García.
“No sé por qué me respondió, pero lo hizo. En otros países, eso no hubiese sucedido“, agregó.