Felipe VI, que gestiona por primera vez la partida asignada a la Casa Real tras su proclamación como rey en junio pasado, se ha reducido su sueldo en un 20 por ciento respecto a los 292.752 que tenía como asignación el rey Juan Carlos en el ejercicio 2014.
La reina Letizia percibirá una asignación que supone el 55 por ciento del sueldo de su esposo (128.808).
Don Felipe también ha fijado la cantidad que recibirá su padre, que asciende a 187.356, lo que supone un 80 por ciento de lo percibido por el Rey, mientras que la reina Sofía cobrará 105.396 (45 por ciento).
El resto de la partida presupuestaria destinada a la Casa Real se distribuye en gastos de personal (3,8 millones), gastos en bienes y servicios (2.9 millones), inversiones (190.606) y un fondo de contingencia (155.500).
El pasado año, el rey Juan Carlos mantuvo su sueldo congelado después que el presupuesto anual de la familia real se viera reducido en un 2 por ciento respecto a 2013.