El ritmo de llegadas es “sin precedentes“, al realizarse la comparación con otras zonas de conflicto como Afganistán y Pakistán, Irak, Yemen o Somalia, dijo Nicolas Rasmussen, Director de NCTC, en un testimonio escrito divulgado antes de una audiencia que debe sostener el miércoles ante el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes, en Washington.
“Estimamos que al menos tres mil 400 de esos combatientes extranjeros vienen de países occidentales, entre ellos unos 150 estadounidenses” , estimó Rasmussen.
El número de aspirantes a viajar también está aumentando, acotó, señalando que “la mayoría” de los que salen en este momento se unirá a las filas del grupo yihadista Estado Islámico (EI) , que actúa ahora en Siria e Irak.
“Las tendencias son claras e inquietantes” , estimó el funcionario, quien subrayó que “los campos de batalla en Irak y Siria proporcionan a combatientes extranjeros experiencia de combate, armas y entrenamiento con explosivos y el acceso a redes terroristas que puedan estar planeando ataques dirigidos contra Occidente“.