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Apoyo al surgimiento del IGSS

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Con motivo del bicentenario de la Independencia de Guatemala 1821-2021 se hace un recorrido de los seguros en Guatemala. Esta vez se tratará sobre el origen del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social, IGSS y los criterios ideológicos que se utilizaron para otorgar beneficios a los afiliados.

El libro de Óscar Barahona Streber —abogado— y J. Walter Dittel —actuario—, titulado Bases de la Seguridad Social en Guatemala, impreso en el Centro Editorial de la Ciudad de Guatemala el 21 de septiembre de 1946, 215 pp., contiene la presentación y proyecto de ley de lo que sería más adelante el IGSS. A continuación, un extracto de lo que exponen los autores.

Cuando se estudió el proyecto de ley del IGSS, existían algunos sistemas mutualistas, que funcionaban principalmente a base del conocido principio de recaudar cuotas en el momento en que muere uno de los asociados, para entregar una suma alzada a los causahabientes de éste. Entre ellos, la Sociedad de Auxilios Mutuos del Comercio de Guatemala, la Sociedad del Seguro de Vida del Gremio Obrero, la Sociedad de Seguro de Vida del Gremio Ferrocarrilero, y otros más que protegen a ciertos grupos profesionales como los miembros del Cuerpo Médico. Estos sistemas significaban bien poco dentro del conjunto del país.

Las actividades aseguradoras privadas se concretaban principalmente a la colocación de seguros de vida, seguros de incendio y líneas aliadas, y, en forma mucho más reducida, a la colocación de seguros de automóviles, de seguros marítimos, de pólizas de fidelidad y otros de menor importancia.

El total de las pólizas colocadas en Guatemala era de Q36 millones, casi la mitad de lo colocado en Costa Rica. En Guatemala el seguro de vida era del 28%; incendio, 53%; seguro marítimo, 10% y automóviles, 6%.

Los autores señalan que en Guatemala no existía un código o ley de seguros. No existían compañías aseguradoras nacionales, con excepción del Departamento de Seguros, Fianzas y Capitalización del Crédito Hipotecario Nacional, que es banco estatal desde 1930. Recién en ese momento se acababa de fundar una compañía dedicada al negocio de fianzas, actividad que es típicamente aseguradora.

Las conclusiones de los autores en el capítulo primero sobre los antecedentes de los seguros sociales se resumen así: las condiciones políticas no han constituido un medio propicio para el desarrollo de las instituciones de orden social, especialmente cuando se han desenvuelto dentro de un ambiente dictatorial; carencia de organizaciones administrativas y técnicas adecuadas para la correcta aplicación de las leyes existentes; falta de desarrollo sindical entre la clase trabajadora y falta de criterio de conjunto entre las gentes llamadas a resolver estos problemas.

Las observaciones finales de los autores en el capítulo segundo sobre aspectos relacionados directa o indirectamente con la implantación de los seguros sociales son los siguientes: todo estaba por hacerse y eso constituía una ventaja o una desventaja; las ventajas inmensas que tiene un régimen unitario de seguros sociales se podrán alcanzar con facilidad en Guatemala; recuerdan que le propusieron a la Comisión de Seguros Sociales, que antes de emprender las investigaciones y estudios respectivos, se discutieran y trazaran las bases ideológicas sobre las que iba a descansar el sistema que se fuera a implantar en Guatemala, lo cual encontró amplia acogida; el sector patronal vio con simpatía la idea, los trabajadores, sindicalizados o no, la apoyaron con entusiasmo.

Concluyen los autores: en síntesis hay muchos factores favorables para la correcta implantación de los seguros sociales en Guatemala.

josemolina@live.com

ESCRITO POR:

José Molina Calderón

Economista. Consultor en gobierno corporativo de empresas familiares. Director externo en juntas directivas. Miembro de la Academia de Geografía e Historia de Guatemala. Autor de libros de historia económica de Guatemala.