Campaña para detener el éxodo
Consideramos que la capacidad de propagar información de los medios de comunicación debe ser utilizada para causas nobles. Y esta lo es. No será la primera vez que colaboramos con este tipo de cruzadas, y ahora lo hacemos por la gravedad de la crisis que estalló hace pocas semanas y que ha provocado reacciones de dolor y estupor en Guatemala, El Salvador y Honduras, así como entre las autoridades estadounidenses, que de pronto se encontraron con un problema muy serio, aunque existía desde hacía tiempo.
La campaña también va dirigida a las autoridades guatemaltecas, para que aumenten sus esfuerzos por ejecutar las capturas de los mareros, quienes, debido a que amenazan a los jovencitos y los obligan en muchos casos a integrarse a las pandillas, incrementan los numerosos casos de éxodo, por temor, que resulta ser tan doloroso como el de quienes arriesgan todo con tal de ir a reunirse con sus familiares, que deben hacer esfuerzos a veces muy difíciles para conseguir los cinco mil dólares que cobran quienes los llevan.
Esta campaña desea también publicar testimonios de personas que han hecho el viaje, han sido capturadas por las autoridades estadounidenses, mantenidas en centros de detención y luego enviadas de regreso. Invitamos a quienes deseen hacerlo, comunicarse con las redacciones de los tres medios informativos, para que sus casos sean conocidos por los lectores. Igualmente nos interesa saber la opinión a este respecto de los usuarios de las redes sociales.
El problema de los niños que se van de Guatemala en estas condiciones es un problema de todos. La decisión de irse en semejantes condiciones tomada por los adultos es el resultado de una medida personal, que tiene alguna idea siquiera de los enormes riesgos. Pero los niños muy pronto se encuentran en medio de tierras desconocidas y con personas no necesariamente cumplidoras de su palabra. Los efectos para la psiquis infantil y juvenil pueden permanecer para toda la vida e incluso afectarlos cuando pase el tiempo y se conviertan en adultos y en padres.
La campaña se considerará exitosa si las estadísticas demuestran una disminución del número de casos. Hay que individualizarlos, ponerles rostros, lágrimas, esperanzas truncadas. Es un esfuerzo nacional que realmente no tiene precedentes, porque ha salido a luz una realidad ignorada o deliberadamente ocultada. Por eso Prensa Libre, Guatevisión y El Quetzalteco reiteran su decisión de divulgar esta necesaria y humana campaña.