HAGAMOS LA DIFERENCIA
Debemos prepararnos…
Quizá él título de mi artículo parece sensacionalista, y sí… el futuro es incierto. Estamos a la expectativa de lo que sucederá en el 2022 y de allí en adelante, así como ante las repercusiones negativas que pueda traer la pandemia. Los cambios tecnológicos a los que debemos adaptarnos, las restricciones que existen y continuarán para la convivencia. Sin embargo, y aunque para algunos les sea difícil de creer, es más lo positivo que viene para el futuro, que lo negativo. Los avances tecnológicos permitirán más comodidad para la humanidad, en todos los niveles: comunicación, diversión, salud, trabajo, etc., como ha estado sucediendo vertiginosamente en los últimos años.
' Estamos en la era del conocimiento, en donde este será el activo más valioso, por lo que debemos prepararnos.
Samuel Reyes Gómez
Pero, es importante, para recibir el futuro, estar preparados. Enero es un buen mes para planificar. Una de las mejores vías para prepararnos es “La Educación”. Debemos hacer planes de adquirir conocimientos y competencias para encarar el mañana. En Guatemala el proceso educativo inicial formal está conformado por los siguientes ciclos educativos: a) preprimaria, que atiende la población de 5 a 6 años b) primario: para la población de 7 a 12 años, c) el nivel básico para adolescentes de 13 a 15 años y el nivel diversificado para la población de 16 a 18 años. Aunque el sistema educativo adolece de serias deficiencias, el completarlo, permite certificar una carrera que le permita ejercer labores en forma más calificada.
Cursar estudios universitarios debería ser una meta de cualquier joven recién graduado, pero también para personas que desean adquirir competencias para desempeñarse profesionalmente. Actualmente existe una gama variopinta de oportunidades para realizar este tipo de estudios, sobre todo ahora con la pandemia. Las universidades se vieron obligadas a trabajar en forma “remota” y también se abrió el abanico de carreras a nivel nacional e internacional.
Es importante conocer que para que un título esté plenamente respaldado lo mejor es estudiar en una Universidad que esté avalada por el Consejo de Enseñanza Superior privada de Guatemala –CEPS- En Guatemala además de la Universidad de San Carlos que es la Universidad Pública con asignación presupuestaria de parte del estado, están actualmente autorizadas las siguientes universidades privadas: Universidad Rafael Landívar, Universidad del Valle de Guatemala, Universidad Mariano Gálvez, Universidad Francisco Marroquín, Universidad Rural de Guatemala, Universidad del Istmo, Universidad Panamericana, Universidad Mesoamericana, Universidad Galileo, Universidad San Pablo de Guatemala, Universidad Internaciones, Universidad de Occidente, Universidad Da Vinci de Guatemala y Universidad Regional. En total son 15 Universidades.
Como ejemplo de la variedad de posibilidades para estudios universidades les comento que tengo vinculación con la Facultad de Ciencia, Tecnología e Industria de Universidad Galileo y por lo mismo conozco la amplia oferta de programas que se desarrollan, los cuales pueden adaptarse para diferentes necesidades y disponibilidades de tiempo y recursos de los estudiantes, por ejemplo se ofrecen carreras de ingenierías que exigen un tiempo completo de 30 horas de dedicación semanales, así como licenciaturas con menor exigencia de tiempo, variedad de posgrados y maestrías, así como doctorados. Hoy día, se diferencia entre cursos “remotos” que son virtuales en forma sincrónica que al volver a la normalidad serán presenciales o híbridos y entre cursos completamente virtuales que son asincrónicos. Existen programas para estudiar entre semana, fines de semana o de noche. La educación permite que estemos preparados para laborar o para emprender, recuerden que estamos en la era del conocimiento, en la que, quienes lo tienen contarán con un activo de valiosa cuantía, mayor que recursos materiales de los que muchos presumen en la actualidad.