CATALEJO

El coronavirus, China, Italia y OMS

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El tema del coronavirus tiene una complejidad gigantesca. Se deben mantener los esfuerzos mundiales para encontrar la vacuna y también analizar el asunto con las informaciones aparecidas como llovizna perenne. También es necesario analizar hechos con diversos niveles de relación, a veces muy difíciles de ver a simple vista, y ese es el tema de este artículo, basado en informaciones recibidas por diversos medios. Deseo permitir a los lectores sacar sus propias conclusiones, más allá de posibles interpretaciones políticas o ideológicas. El primer tema son las curiosidades y dudas provocadas por los acontecimientos en la ciudad china de Hunan, cuna de la pandemia, cuya explicación es urente en base a la lógica natural propia del pensamiento humano.

' Los criterios hoy publicados ayudan a entender los círculos mundiales implicados en la mayor pandemia de la historia.

Mario Antonio Sandoval

Hay miles de contagiados en grandes urbes occidentales situadas a 15 mil kilómetros de Hunan. La India está cerca y el efecto no ha sido profundo, aunque Delhi y Mumbai están cerradas. Dicha ciudad china fue reabierta el 8 de abril, está a menos de 1,200 km de las principales, como Beijing y Shanghái, capital económica, donde viven los empresarios multimillonarios, no hay cuarentena y los casos fueron relativamente pocos. Ningún líder político o militar ha dado positivo con el virus, y todos viven en Beijing, donde no hay cuarentena. Las acciones de empresas chinas han caído 10%, pero en el mundo valen mucho menos. Por eso, algunos analistas consideran al coronavirus como un arma bioquímica china para ganar supremacía económica mundial.

Otro tema poco conocido es la relación de China con Italia, y de China y Etiopía con el actual director de la Organización Mundial de la Salud, sobre el cual recibí un texto del escritor italiano Giacommo Nicolazzo. En tiempo del primer ministro Matteo Renzi, líder del Partido Comunista italiano, los chinos comenzaron a comprar negocios financieros, industriales, de telecomunicaciones y moda en Italia. En el 2014, China gastó 5 mil millones en esto, cifra ascendida a 52 mil millones cuando se vio obligado a renunciar en el 2016. El Banco de China posee cinco bancos importantes, respaldados en secreto por Renzi, con fondos robados al plan de pensiones. A través del “Equity Exchange China Milan” (Intercambio de valores) con lo cual los fondos regresaron a China.

Entre las empresas con mayoría de accionistas chinos se encuentra Fiat Chrysler. Chem China, coloso de la industria química, adquirió llantas Pirelli. Los emblemáticos yates Ferreti y la industria de la moda también fueron vendidos Miles de chinos entraron ilegalmente, hasta ser cerrada la frontera por el siguiente primer ministro Salvini, quien estuvo poco tiempo, pero el sucesor, Giuseppe Conti, igual de izquierda recalcitrante, la reabrió. Los chinos poblaron áreas de Lombardía y esto es importante porque fue allí donde en diciembre pasado se produjeron casos de coronavirus, los hospitales se sobrecargaron y la falta de fondos a causa de la corrupción causó la tremenda tragedia humana italiana de esta pandemia, lo cual es ya del conocimiento mundial.

Nicolazzo hace un señalamiento adicional: la relación en todo esto de Thedros Adlanon, jefe de la Organización Mundial de la Salud. No es médico, sino salubrista comunitario. Estaba en Etiopía cuando hubo un ataque de cólera, y existía un acuerdo multimillonario de obras con China y la epidemia impedía continuarlas. Adlanon tomó control de las instituciones encargadas de informar de las cifras sobre enfermedades y desaparecieron los casos de cólera. Así se reanudaron las obras. Al abrirse la oportunidad de llegar a dirigir la OMS, lo propuso Etiopía con apoyo de China. La pandemia del coronavirus sólo fue otorgada cuando era imposible callarlo más, ante la realidad de lo ocurrido en Europa. Yo le encuentro lógica a estos criterios y sin duda hay lecciones para todos.

ESCRITO POR:

Mario Antonio Sandoval

Periodista desde 1966. Presidente de Guatevisión. Catedrático de Ética y de Redacción Periodística en las universidades Landívar, San Carlos de Guatemala y Francisco Marroquín. Exdirector de la Academia Guatemalteca de la Lengua.