CATALEJO
Encuesta de AsíEs: no es problema la corrupción
En la reciente encuesta de AsíEs respecto a los criterios de 410 personas residentes en el área metropolitana, el 60.2% de los consultados considera a la delincuencia e inseguridad como el principal problema del país, y sigue en el tercer lugar la corrupción, con apenas un 7.5%. Este dato llama mucho la atención, porque fue medido en el área del país con mayor posibilidad de criterio respecto a dicha lacra político-económico-social. Según la medición, la economía está mal para el 58%; ha empeorado, para el 71%. Las distancias entre esas mediciones respecto a la corrupción demuestran una extraña falta de conocimiento o desinterés, y sobre todo de la relación entre el dinero mal habido y los problemas nacionales y municipales.
' Tienen resultados negativos: mujeres candidatas y expresidentes, y hay desconocimiento de figuras históricas, culturales y deportivas.
Mario Antonio Sandoval
Resultados reveladores tuvieron las preguntas sobre la admiración de los guatemaltecos por deportistas, artistas y políticos. Ricardo Arjona, con 60.2% menciones, encabeza el grupo artístico, y es el más admirado en todos los campos. Ocupa el segundo lugar Miguel Ángel Asturias, empatado con Ricardo Andrade. Le siguen Gaby Moreno, 1.7, y Efraín Recinos, 1.6. Con menos de 1% están, entre otros, José Joaquín Palma (0.2%). De los deportistas, Érick Barrondo tiene la suma mayor, 40.1. Los expresidentes están así: Alfonso Portillo, 28.9; Álvaro Arzú, 15.8; Jorge Ubico, 10.7; Arévalo, 7.4; Árbenz, 3.4. Jimmy Morales, casi expresidente, un esperable 2-6%. Ríos Montt llega a 9.2%. Este último grupo permite hacer comparaciones interesantes.
De los 15 expresidentes medidos, los resultados faltantes son: 0.5% cada uno, Serrano y Lucas; Otto Pérez, 0.9; Cerezo, 1.1; Colom, 1.5; y Berger 1.6. De los candidatos, el exaspirante Mario Estrada comparte 0.5% con Giammattei. Las mujeres tienen estos datos: Zury Ríos, 1.4%; Thelma Aldana, 0.5; y Sandra Torres, 0.6. Estas cifras adquieren más sentido cuando se les compara con los porcentajes de respuestas, porque para el 70% de los encuestados Guatemala ya está lista para ser gobernada por una mujer. Los escasos resultados de expresidentas y candidatas se deben a la ignorancia de la historia, aunque sea muy reciente, así como a una respuesta provocada por el deseo de los hombres y mujeres encuestados de no parecer machistas y retrógrados.
Respecto a la asistencia a las urnas, la encuesta señala: de quienes tienen DPI, el 26% no está empadronado, pero el 80% (de ese 26) sí piensa votar. Del 74% de los empadronados sólo piensa votar el 57%. Esto permite predecir la cantidad de votantes el 16 de junio. La división del DPI se puede hacer respecto a la edad, así como al estatus socioeconómico. El empadronamiento fluctúa en todos estos niveles socioeconómicos entre 70 y 80%, pero cambia al medirlo por edades: entre 18 y 34 años, 63%; 35-54 años, 84%; y 55 o más, 77%. Los votantes de 55 años o más predicen una ausencia de 32%, mientras los otros dos la señalan en 17%. En cuanto al voto nulo, los mayores lo fijan en 12% y los otros dos grupos lo ven una realidad en el 25% de sus miembros.
La encuesta sorprende por el resultado sobre la corrupción. Se debe profundizar para explicarlo. Es útil, porque no intenta predecir al ganador de la Presidencia, sino se refiere a porcentajes, razones, niveles socioeconómicos y edades. El resultado más creíble, creo, se refiere a estas divisiones sociales. Los jóvenes de menos de 40 años han vivido en gobiernos producto de elecciones sin mancha, aunque con candidatos malos, y tiene la ventaja de un posible voto razonado a causa de la proliferación de mensajes vía medios electrónicos y redes sociales. Estas elecciones, ciertamente, tienen demasiados cambios y hay disminución en la credibilidad de la totalidad del proceso. Quien gane deberá tener clara la dificultad de mentir y de robar o de corromperse.