Con otra mirada

Profesionales avalan peatonalizar La Antigua Guatemala

Positivo resultado del ensayo y la grata experiencia de las plazas y calles convertidas en paseo peatonal

La conservación de bienes culturales es una modalidad cultural que surgió legalmente, con carácter internacional, en el S. XX. Dentro de esos bienes, la conservación de la arquitectura y el urbanismo fue consecuencia de los daños a ciudades históricas durante la II Guerra Mundial. Algunas de esas ciudades fueron reconstruidas gracias a la documentación y registros existentes en las instituciones administrativas correspondientes. La Antigua Guatemala es una excepción por el hecho de ser una ciudad del S. XVIII abandonada en pleno desarrollo barroco, por su parcial destrucción durante el terremoto de 1773 que obligó su traslado. Vicisitudes aparte y con el paso del tiempo, se transformó en una ciudad de monumentos en ruina, milagrosamente conservados… de ahí su valor actual.  

Quienes disfrutan de su vista, si no de manera permanente, al menos durante los fines de semana.

La ciudad conservada fue merecedora de títulos y reconocida como un atractivo turístico. En la década de 1980, en pleno proceso de conservación, su vocación fue determinada como habitacional, cultural y turística; calidad que trajo consigo la creación de infraestructura turística, con la que surgieron problemas concomitantes, como fue la especulación en el valor y uso del suelo. Aprietos normales en todas partes del mundo, en ciudades y centros históricos. Condiciones ante las que La Antigua Guatemala no estuvo preparada cuando aires democráticos empezaron a soplar en 1985 con una nueva Constitución Política, con gobiernos democráticamente electos e intentos por firmar la paz dentro del contexto de la guerra interna que empezó en 1960 y no terminó sino hasta 1996, cuando fueron firmados los acuerdos de paz “firme y duradera” entre el Ejército y la Guerrilla.

Período convulso durante el que fue notoria la pérdida de los valores morales de nuestra sociedad y el desvergonzado emerger de la corrupción; cuando pareció válido hacer lo que fuera y actuar de cualquier manera para satisfacer intereses propios, al punto que los ideales establecidos en la ley para la protección de la ciudad de 1969 dejaron de tener solvencia ante el avasallador poder económico.

La incapacidad administrativa se sumó a la falta de criterio técnico y profesional. Triste combinación que resultó en el paulatino pero firme deterioro de la arquitectura y el paisaje; de la movilidad, la seguridad y el desarrollo, concepto que fue confundido, a propósito, con crecimiento. Artificio que propició desatender la ampliación de la trama urbana, proliferación de centros comerciales en áreas no aptas, conjuntos habitacionales cerrados e inconexos; en negar la posibilidad de construir vías periféricas y resolver las necesidades de la ciudad y sus habitantes.

El pasado miércoles 20Mzo2024, profesionales de la arquitectura y la ingeniería, respetuosos de la ciudad, que han trabajado en ella y aportado ideas para su conservación y desarrollo, publicaron en las redes sociales, chats y grupos de amigos, un Manifiesto mediante el que se adhieren a la iniciativa de la actual administración municipal de prohibir, durante los domingos de la Cuaresma y la Semana Santa, el estacionamiento vehicular en el casco fundacional. Los profesionales sugieren aprovechar el positivo resultado del ensayo y la grata experiencia de las plazas y calles convertidas en paseo peatonal para que, una vez pasada la Semana Santa, se programe la práctica de devolver a la ciudad su carácter humano, de manera regular, para goce de sus habitantes y de quienes disfrutan de su vista, si no de manera permanente, al menos durante los fines de semana.  

Para eso existen propuestas de diferentes grupos, formulados años a atrás, que habrán de ser considerados y puestos en vigor para beneficio de todos.

ESCRITO POR:

José María Magaña

Arquitecto -USAC- / Conservador de Arquitectura -ICCROM-. Residente restauración Catedral Metropolitana y segundo Conservador de La Antigua Guatemala. Cofundador de la figura legal del Centro Histórico de Guatemala.