POR LA LIBERTAD

Quienes crean riqueza nos enriquecen

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Un pensamiento erróneo y muy difundido en el mundo entero es el que la riqueza de unos causa la pobreza de otros. Es un pensamiento que se basa en supuestos erróneos donde la riqueza está dada y no se puede aumentar. La realidad es que el mundo ha ido mejorando enormemente y disminuyendo la pobreza continuamente y a pasos agigantados desde la revolución industrial, y todos estamos mucho mejor hoy que ayer.

Quienes crean riqueza lo hacen no solo para ellos, sino para la sociedad, enriqueciendo a todos. Uno no puede enriquecerse si no es sirviendo de la mejor manera a los demás. Bill Gates no nos hizo pobres haciéndose multimillonario. Todos nos hemos beneficiado de sus inventos y productos. Gracias a sus programas que ahora utilizamos en todas nuestras computadoras nos hemos vuelto más eficientes. Nos hemos enriquecido al igual que él se ha enriquecido. Lo mismo pasa con cualquier persona que inventa, produce masivamente un producto y lo vende. Lo compramos libre y voluntariamente pensando que lo que adquirimos tiene más valor que lo que damos a cambio. Si nadie nos obliga y damos nuestro dinero a cambio de un producto es porque lo consideramos más valioso que el dinero que tenemos, y eso nos enriquece. Al ir al supermercado y pagar nuestras compras, agradecemos a la cajera y ella también a nosotros. Ambos ganamos.

Las empresas que más ganan lo hacen porque son las que mejor sirven a los consumidores. Son los que han entendido qué es lo que quieren los que demandan sus productos, cómo lo quieren, con qué calidad, en qué momento y a qué precio. El consumidor compra el producto que valora más y da a cambio su dinero. Esos ingresos le permiten a la empresa pagarles a todos sus factores de producción que libre y voluntariamente colaboran entre sí aportando capital, mano de obra y empresarialidad. Bill Gates, quien ha sido una de las personas que más millonarios ha creado en el mundo entero.

' Las empresas que más ganan lo hacen porque son las que mejor sirven a los consumidores.

Ramón Parellada Cuadrado

Una de las críticas contra las sociedades modernas y los más ricos como Estados Unidos de América es la de la desigualdad. Se critica al capitalismo, y sin embargo todos quieren emigrar a ese país que da más oportunidades de mejorar el nivel de vida de quienes participan en ella. Curiosamente la gente emigra hacia ese país y no hacia Cuba, Venezuela, Corea del Sur, por decir algunos ejemplos. Van hacia donde esperan un futuro mejor. Donde hay un estado de Derecho y libertad, donde los derechos individuales de la vida, la propiedad y la libertad son defendidos y protegidos sobre cualquier otro argumento. Un sistema así donde la igualdad que existe es la de cada individuo ante la ley es un sistema que produce desigualdades de resultados. ¿Por qué?
Porque todos somos diferentes. Somos iguales ante la ley, pero cada uno tiene diferencias en habilidades y características que nos hacen ser seres individuales con nuestras propias diferencias. No todos llegamos a ganar medallas de oro en los juegos olímpicos, ni tenemos habilidades matemáticas o espaciales como las de lo genios, ni belleza como las mejores modelos del mundo, ni muchas otras cosas que admiramos en otros. Pero aun con nuestras deficiencias, gracias a la división del trabajo y el intercambio libre y voluntario, siempre tenemos algo que aportar a la sociedad y nos beneficiamos de ello.

Cuando nos vuelvan a decir que somos pobres culpa de los ricos, pensémoslo bien antes de sumarnos a esas ideas, porque no son ciertas. Hay mucho más para analizar que una simple y falsa conclusión que provoca resentimiento, envidia y pobreza.

ESCRITO POR:

Ramón Parellada

Empresario. Catedrático universitario. Director del Centro de Estudios Económico-Sociales (CEES).