Presento algo dulce ante la cantidad de amargos problemas que estamos viviendo, para que podamos darnos un respiro ante tanta complicación que se ha desatado en mi querida Guatemala. En muchos de mis viajes al interior, he conocido a personas con diferentes especialidades que ponen en alto el nombre de Guatemala. Aunque en este artículo solo presento a cuatro de ellos, en el futuro les daré a conocer más. La primera es María Mercedes Beteta, mujer trabajadora, ícono de su ciudad, quien ha estudiado las artes culinarias de la época precolombina y su talento lo despliega en la cocina.

Ella nos dice que entre las comidas que vienen de la época precolombina está el atole maya-quiché que lleva maíz dorado y molido y se le echa cacao, una raja de canela y un toquecito de raspadura de panela. Un secreto mejor guardado es que los ingredientes de las comidas no fueron eliminados de las dietas cuando llegaron los españoles. Otra comida que nos cuenta que perdura desde esas épocas es el bachá de Santa María Cahabón, en Alta Verapaz. Usan el achiote de la zona y el chile de Cobán cortado en pedazos grandes (Samat), verdecitos y bien frescos junto al pollo y el marrano y chicharrón, pero también nos dice que se puede preparar con pescado o camarones. El agente espesante que le da un sabor único es la pepita tostada y molida. El toque final es la pimienta. Ella hace un trabajo maravilloso no permitiendo que se muera la cocina precolombina que es parte de nuestra tradición e identidad nacional. Hoy sábado la veremos cocinando en Los secretos mejor guardados, 9.30 pm.

Otra personalidad que muchos antigüeños identifican como ícono de su ciudad es Lex Cargo, un joyero que desde varios años tiene firmado un contrato con la famosa Casa Chanel al destacarse por su trabajo artesanal junto a su equipo de orfebres antigüeños. Su trabajo no solo ha sido como agregado cultural en ciudades como Coral Gables, Florida, sino que sus joyas han llegado hasta la Casa Real de España, con la reina emérita SM doña Sofía, abriéndose la puerta al mundo de la moda y diseño internacional. Las otras 2 casas reales son las de Qatar y Japón. Luminarias como Paulina Rubio, Jennifer Love Hewitt, Jennifer López, Silvia Pinal, Keanu Reeves y David Bisbal han portado sus piezas. Lex es una joya en sí.

Otro merecido reconocimiento va para el talento de Rolando Aguilar, artista plástico guatemalteco, ganador tres veces consecutivas de la Bienal, el premio de arte más importante de Guatemala. Sus premios nacionales e internacionales son innumerables, y siendo “chivito”, el departamento de Quetzaltenango se ha de sentir muy orgulloso de él. Entre sus obras de las que estoy enamorada están: Sublimes presagios en acrílico sobre cartón ilustración, El fruto prohibido y el Jardín de los sentimientos. Los colores que utiliza son tan vivos y llamativos que con ellos logra reflejar el color de Guatemala.

Sylvia Tenenbaum, una reconocida artista textil guatemalteca, se basa en las historias impregnadas en los textiles de las mujeres indígenas de nuestro país, perpetuándolas en forma de mosaicos a gran escala y móviles aéreos que forman parte de su discurso interétnico, urbano y contemporáneo. En el 2018, fue ganadora en el Reino Unido de la London Design Biennale en el pabellón de Guatemala. Sus éxitos internacionales incluyen premios colectivos como el Women Weaver: The Warp of Memory, en Miami, Florida, y su participación en el World Textile Art Biennial, de Uruguay. Su memorial Lo innombrable se exhibe permanentemente en el Museo del Holocausto en Guatemala. Sylvia Tenembaum es una joya para Guatemala, pues honra historias milenarias a través de su arte vivo.