A CONTRALUZ
Contraste de percepciones
LA RESPUESTA DE CÓMO LE FUE a Donald Trump en el debate del lunes pasado se acerca mucho a la percepción que existe sobre los filmes de Hollywood. En muchas ocasiones los expertos pueden calificar una película como basura o de baja calidad, pero la gente pasa por alto la advertencia y va a verlas en tropel, en tanto que otras con buena calificación apenas logran recaudar lo invertido. Algo similar ocurrió con el reality show de los candidatos presidenciales del imperio porque los expertos coinciden en que Hillary Clinton tuvo un mejor desempeño por su preparación antes del debate, además de su experiencia política de años. Eso le permitió aparecer como una política consumada; ella mismo lo dijo: “Me he preparado para ser presidenta”. Pero esa imagen cultivada habría sido el elemento que disgustó a un alto porcentaje de estadounidenses que rechaza a la favorita del establishment norteamericano. La ven como una política tradicional.
LOS SONDEOS EFECTUADOS en línea después del debate confirmarían el aserto de que la gente ve lo que quiere ver, o sea ya existía una construcción social de quién sería el ganador independientemente de quién estuviera mejor. Por ejemplo, la encuesta del Drudge Report, en la que participaron más de un millón de internautas, dio como ganador a Trump por 82.25% y Clinton solo captó 17.17%. En el sondeo de Fox News, el 52% se decantó por el republicano y el 48% por la demócrata. CNBC dio como triunfador a Trump por 67% y Clinton solo 33%; el sondeo de Boston Globe dio 60% al magnate y 40% a la exsecretaria de Estado, y Time dio a Trump el 54% y a su contrincante el 46%. A estos se sumaron Breitbart, con 75.5% para Trump y 24.25% para Clinton, mientras que Variety le dio 54.53% al primero y 45.47% a la segunda.
EN LA ESQUINA OPUESTA se situó CNN/ORC que dio como ganadora a Clinton con 62% contra 27% de Trump. La diferencia es que este sondeo fue con 521 votantes registrados, vía telefónica, o sea más confiable que el voto en la web. Otro resultado favorable para la demócrata fue el de Public Policy Polling con 51% y 40% para su adversario. Todos los medios e instituciones han señalado que estos resultados no tienen carácter científico porque pueden ser manipulados por los seguidores de uno u otro contendiente y que, en las próximas semanas, cuando se efectúen encuestas a escala nacional, se podrá tener una valoración del impacto real del debate. Empero, estos sondeos dejan ver una tendencia de rechazo a la vieja casta política y quieren a alguien que salga de ese cliché.
EL DEBATE SE EFECTUÓ en medio de un desgano del electorado estadounidense y un virtual empate de preferencias. HuffPost Pollster señalaba que la tendencia de voto, según las últimas encuestas nacionales, favorecía a Clinton con un 47.6% y daba a Trump un 44.1%. Un sondeo de Gallup definía que solo un tercio de entrevistados cree que la demócrata sería una buena presidenta y solo una cuarta parte confía en el republicano. Un sondeo de The New York Times/CBS arroja que el 67% de entrevistados considera que Trump es una opción arriesgada como presidente por su temperamento, pero el 51% considera que tendría mejor desempeño en la economía y la generación de empleo. A la pregunta de quién representaría un cambio real en la forma de conducir el Gobierno, el 48% ve a Trump como más trasformador frente a un 36% que respalda a Clinton. A la luz de estas percepciones es difícil tener un panorama claro a apenas cinco semanas de unos comicios que afectarán a los migrantes hispanos: Mal si triunfa Clinton, peor si gana Trump.
@hshetemul