No es la única actividad a la que el presidente Pérez Molina dejaría de asistir. Se le une la presencia en Honduras para el cambio de gobierno y la reunión en Cuba de la Comisión Económica Latinoamericana y del Caribe, todas ellas programadas en el lapso de un mes que la vicepresidenta estará recluida en su casa, reponiéndose de los efectos del ataque ocurrido el martes en el interior del Teatro Nacional.

En Davos, la presencia del presidente Pérez Molina es conveniente porque el acuerdo con México se refiere a la instalación de un gasoducto para Guatemala. En el caso de Honduras, el país debe estar representado en la ceremonia de la toma de posesión, y en Cuba los temas tienen interés a causa de tratarse de asuntos económicos comunes del continente. Se trata de actividades que obligarían al mandatario guatemalteco a viajar de Guatemala a Europa y de allí a Cuba, en una semana.

El equipo de análisis del Gobierno necesita meditar cómo debe actuar a fin de que no se puedan utilizar como afirmaciones de una posible incapacidad, al menos temporal, las aseveraciones en los documentos de la querella acerca del estado de salud de la vicepresidenta en su aún vigente acusación y juicio por acoso psicológico a causa de las publicaciones de prensa que le hicieron intentar el silencio de los críticos utilizando la ley que castiga el femicidio y el acoso a las mujeres.

Todos los casos importantes tienen entre sus particularidades la de ser motivo de estudios sobre perspectivas nuevas. En Guatemala, la población en general no tiene duda alguna de cuál es el papel de la vicepresidenta de la República: sustituir al presidente. Pero es muy poco lo que se conoce acerca de cómo se debe actuar en el caso de que sea este último quien por cualquier motivo deje de ejercer el cargo. La discusión sobre este tema arrojará luces que evitarán interpretaciones que no corresponden a la realidad.

Independientemente del caso actual y sus actores, es beneficioso para el país que sean escuchadas las opiniones de los expertos legales en referencia al tema de qué hacer cuando el presidente se ve impedido de ir a un lugar en el extranjero donde se realice alguna actividad de beneficio y de conveniencia nacionales como consecuencia de que el vicepresidente, por cualquier motivo, no pueda ejercer la presidencia interina de la Nación. El conocimiento popular de estas posibilidades y cómo se debe actuar contribuye a tranquilizar los ánimos cuando ocurren situaciones políticas inesperadas.