El incomparable talento compositor del espigado trovador y la potente voz de la joven cantante se dan a la tarea de enmarcar en este microfilm la canción Fuiste tú y fundirla con las alegrías, las bellezas y lo positivo de Guatemala.

Hay varias lecciones que con esta su iniciativa nos deja Ricardo Arjona. Veamos:

1. Ricardo Arjona asumió con valentía la fortuna de ser un cantautor exitoso, y sin miedo alguno, asoma a la vida empresarial fundando su propio sello discográfico, aventura que implica para alguien de su posición y éxito un desafío de proporciones incalculables. Él abandona la comodidad de un sello disquero de buena posición y ha decidido tomar el control de su destino artístico y empresarial. Es parte de la “empresarialidad” que él constituye en su camino, con los riesgos y oportunidades que esto implica.

2. Desde la cúspide de su desempeño artístico a escala global, Arjona asume con absoluta sencillez y generosidad, para compartir el escenario y su creación con una talentosa artista nacional que brilla fuera de nuestras fronteras. Gaby Moreno se está labrando una exitosa carrera en Estados Unidos y Europa, con premios y nominaciones muy importantes, pero sin duda, aparecer junto con Arjona, la proyectará a altos niveles donde su talento brillará más.

3. Producto de su nueva independencia y éxito personal, Arjona da otra enorme lección de generosidad y amor a Guate: quiere ayudar al país, haciendo que no solo se vea el horror de una realidad violenta que, entre sus víctimas cuenta a Facundo Cabral, y se lanza a la proyección de las bellezas de esta nación para acompañar el éxito que está alcanzando —junto con Gaby— con Fuiste tú. Más allá de cualquier plan o meditación, Arjona muestra su generosidad con una creativa y dinámica acción que dejará grandes beneficios a Guatemala, al ser promocionada como ninguna campaña lo podría hacer.

Estas lecciones nos deben abrir la mente para pensar en qué podemos hacer todos por apoyar a este pedazo del globo terrestre que nos vio nacer. Guatemala deberá afrontar los retos de la realidad todos los días, comprendiendo que el camino será duro, pero que tendrá sus recompensas si tenemos constancia para enfrentar los obstáculos, claridad para distinguir la meta y amor por lo que nos toca hacer.

En sus lecciones, Ricardo Arjona deja una ecuación trascendente que deberíamos tomar y practicar: valor ante los desafíos, generosidad, trabajo en equipo y amor al país.

Es el momento de tomar las lecciones de Ricardo Arjona, a las que se suma Gaby, y asumir el reto de querer un mejor futuro para Guatemala gracias al trabajo que todos hagamos.

Deseo que el año 2012, que ya toca a la puerta de nuestra cotidianidad, sea un punto de partida para doblegar a la violencia y comenzar a construir una mejor nación. Mi agradecimiento a Ricardo y Gaby, un abrazo para los lectores y mis mejores deseos por un año repleto de salud y prosperidad para todos.