REGISTRO AKÁSICO

Money…

|

Amilcare Puviani, fundador del análisis administrativo en Italia, postuló en 1903 la teoría de la ilusión financiera. Esta afirma que “cuando los ingresos tributarios no son transparentes o no son conocidos por los causantes, el costo del Gobierno es visto como barato en contra de la realidad, se oscurecen las ventajas a uno o la mayoría de tributantes, lo que incrementa el apetito ciudadano para que se incremente el gasto público, proveyendo a los políticos de la justificación para expandir el tamaño del gobierno”.

En el Organismo Judicial siempre se ha lucrado mafiosamente con las rentas de inmuebles. La razón para oponerse a separar las funciones administrativas de las judiciales se encuentra allí. Los pleitos por la presidencia tienen una base terrenal muy concreta. El Renap debía publicar la nómina de arrendatarios de sus oficinas, muchos se quedarían asombrados que hay unos pocos dueños que rentan inmuebles en varios municipios. ¿Cómo establecieron esa cadena de alquileres?

La magistrada Gloria Porras dispuso de Q3.2 millones; si hubiera más dinero en la Corte de Constitucionalidad, incrementaría el bono revolucionario y lo otorgaría dos veces al año. Como dice un comisionado, se necesita más dinero para fortalecer la justicia. Pregúntele a Porras si su actuación no ayuda a la justicia y verá lo que responde.

De lo que se trata no es de tener más dinero, sino iniciar acciones pertinentes que eviten gastos emergentes no considerados. Es evidente que si se quiere fundar una oficina del MP, en cualquier lugar, se necesita de un local. Si no se previó su expansión, habrá que alquilar. De dónde los políticos, que son definidos como buscadores de renta, se empeñarán en poseer por anticipado los locales que se utilizarán. De la misma manera como ya ocurre con el Organismo Judicial.

Los dueños de locales dirán que no es delito rentar casas para las oficinas estatales. Entonces, ¿por qué se considera que el gran arrendatario de Chiquimula, Baudilio Hichos, es un corrupto por hacerlo? Y ni siquiera es él. Se trata de un inmueble a nombre de su esposa, que pasó por Guatecompras y fue previamente remodelado para el IGSS. ¿Cuántos ya remodelaron para el MP?

No son solo alquileres, sino una constelación de gastos tramposos que deben evitarse por acumulación de fondos, sin previa idea de su aplicación. Lo que se necesita es claridad en la inversión: adquisición de terrenos y construcción de centros de servicios y justicia por municipio, lo mismo para un sistema de comisarías, subcomisarías y estaciones de Policía con número de agentes, así como condiciones dignas de alojamiento, etcétera. Primero los planes; luego, quizás, se ameriten nuevos impuestos, o evitar gastos superfluos, bonos revolucionarios, compras por excepción y otras linduras de la cleptocracia.

Abba canta: dinero, dinero, dinero, es la diversión en el mundo del hombre rico.

http://registroakasico.wordpress.com

ESCRITO POR:

Antonio Mosquera Aguilar

Doctor en Dinámica Humana por la Universidad Mariano Gálvez. Asesor jurídico de los refugiados guatemaltecos en México durante el enfrentamiento armado. Profesor de Universidad Regional y Universidad Galileo.