PLUMA INVITADA
¡No habrá otra!
La voz del pueblo se ha levantado, no puede ser callada. Fueron muchos años de aguante, pero ahora está presente. El nuevo gobernante, en caso de que no suceda nada que frustre este período electoral, debido a la crisis política que vive el país, tendrá la única y valiosa oportunidad de aplicar severos e inmediatos cambios, abriendo nuevos horizontes de confianza y esperanza a los guatemaltecos que anhelan salir a flote del fondo de tanta impureza que los ahoga, no obstante su desconfianza por tanto engaño. Acertadamente se convertirá en un héroe, de eso no hay duda alguna, y esa hazaña quedará marcada en la historia nacional.
Su delicada lucha para cambiar al país le implicará demostrar abierto valor, trabajo, sacrificio, dedicación, entrega y afrontar riesgos, pues enfrentará tenebrosas y poderosas estructuras criminales que han mandado, saqueado, humillado y matado a Guatemala, para levantar la moral de sus habitantes, que han estado arrinconados desde hace varios años por la corrupción, inseguridad, criminalidad, imposición política, manipulación oficial y privada, irrespeto a la vida, falta de trabajo, salud y educación. Somos una sociedad que está de rodillas y que además pasa por la pérdida de principios y valores.
El mandatario elegido, si es una persona sensata, tendría el apoyo de la Comisión Internacional contra la Impunidad, presidida por Iván Velásquez, que ahora cumple su misión, todo lo contrario de pasadas administraciones, que dejaron malos recuerdos, así como del Ministerio Público a cargo de la fiscal general, Thelma Aldana, valiente mujer, impulsadora de la Política Criminal del Estado, con reconocida carrera y experiencia judicial, ética y responsabilidad, quien ha abierto brechas de confiabilidad ciudadana al investigar y descubrir mayúsculos actos corruptos en la dirección de tan riesgoso cargo, aplicando pronta y cumplida justicia. Afortunadamente también se le ha dado seguimiento a la investigación por el cobarde asesinato de los periodistas mazatecos Danilo López, corresponsal de Prensa Libre, y Federico Salazar. En ese sentido, son deseables, también, resultados en torno de las muertes violentas de otros colegas que quedaron en el olvido, como Carlos Humberto Orellana, Luis de Jesús Lima, Jaime Napoleón Jarquín y Luis Alberto Lemus.
El futuro presidente también tendrá que propiciar, dentro de las distancias de la autonomía, el saneamiento de los tres Poderes de Estado, donde existen malos pero también muchos ciudadanos honestos que han cumplido con su deber y merecen el agradecimiento del pueblo; combatir con prontitud el desempleo, inseguridad, violencia y corrupción, entre tanta cantidad de agravios que harán cola. Una limpieza general no le será fácil pero tampoco imposible, pues deberá romper poderosas barreras, contando, eso sí, con la valiosa participación de la población digna y honrada. Los últimos acontecimientos registrados dentro del torbellino que sacude al país, han provocado diversos rumores que deben aclararse. Hay que evitar también falsas acusaciones que dañen el prestigio de inocentes. Tengo la confianza de que habrá un nuevo amanecer para el país. Esta posible y anhelada conquista desbordará el agotado corazón de los guatemaltecos.