EDITORIAL
Oportuno llamado a los contendientes
El Tribunal Supremo Electoral dio ayer un paso firme para aclarar la principal duda creada porque aún falta conocer los resultados del 1.08% de mesas electorales. Esto ocurrió al expresar que en los municipios donde hubo problemas el domingo solo serán repetidas las elecciones municipales y no las presidenciales, lo que está en la ley, y que en todo caso el número de votantes de las localidades con problemas será restado de los sufragios válidos, lo cual repercute en los porcentajes obtenidos por cada uno de los candidatos.
Ello derrumbó cualquier posibilidad de que el partido Líder pudiera beneficiarse de alguna estrategia para atrasar el resultado final de los comicios, y explica el cambio de actitud de la dirigencia liderista, así como la desaparición de la escena política de Manuel Baldizón, cuyo paradero es incierto desde el día de las votaciones.
El suceso electoral del domingo fue el más atípico de todos los anteriores. Una de las inesperadas y seguramente irrepetibles situaciones consiste en que el conteo exacto final debe ser calculado con porcentajes que incluyan centésimas, porque los datos del TSE colocaban ayer la diferencia entre la UNE y Líder en apenas 4,667 votos.
La Ley Electoral señala una serie de procedimientos que deben ser meticulosamente cumplidos a partir del momento en que cerraron las urnas; es decir, el conteo. El TSE hizo lo correcto al explicar el plazo legal para la revisión de actas, el cual termina mañana. Pero no se puede saber con exactitud la fecha en que la máxima autoridad de los comicios declare de manera oficial el porcentaje exacto de los votos y con ello confirme los resultados que terminen con la incertidumbre sobre quién pasa a la segunda ronda.
El Tribunal Supremo Electoral explicó ayer todas las normas legales relacionadas con el conteo de los sufragios, un proceso que toma una semana y que no tiene importancia en condiciones normales, cuando las diferencias de votos son amplias. Debido a ello es necesario que ese trabajo se haga con sumo cuidado, llenando todos los requisitos legales, aunque con la plena conciencia de que el tiempo debe ser el mínimo.
El país se encuentra en un momento justo para demostrar que se cumplen los requisitos y plazos legales. Esto tendrá como efecto coadyuvar en el retorno de la confianza ciudadana. Tanto los partidos políticos como los ciudadanos que se comunican por redes sociales deben tener claro el riesgo de que se abuse de los derechos legales y que es necesario un uso responsable de estas posibilidades de comunicación, a fin de no utilizarlas como medio para difamar a las autoridades o divulgar comentarios sin base, que solo ocasionan inmerecida desconfianza en el TSE.
La máxima autoridad electoral se tardó mucho en dar las explicaciones, lo cual es lamentable, pero no fatal. Ahora debe indicar cuándo es la fecha probable en que se sabrá con mayor certeza cuál es el porcentaje real obtenido por el segundo y tercer lugares, así como las cifras que lo justifican. De esa forma será posible conocer a cabalidad la diferencia entre haber peleado la Presidencia o quedarse fuera de la contienda en forma casi increíble.