no tenga religión jamás significa que sí existen funcionarios y empleados públicos que ejercen sus funciones y estos profesan alguna fe, sus actos estén fuera de la conducta que se espera de quienes creen en esa doctrina y esto, por supuesto, se aplica también a las empresas particulares y nosotros, en general.

Así como la Navidad para muchos, y sobre todo cada vez más para los niños, pierde su significado espiritual y desde agosto se ponen los árboles, las luces y la musiquita para que los almacenes vendan más y la gente piense menos, la Semana Santa es referente para el “veraneo”, pero sobre todo, y esto sí que preocupa, para el consumo de alcohol en grandes eventos y proporciones.

Cada quien tiene libertad para decidir sobre su vida; sin embargo, si existen fechas que tienen un claro significado espiritual, deberíamos, por lo menos, esperar “un algo” distinto y trasladar ese mensaje a quienes estén cerca de nosotros. La Prensa nos informó que vivimos en el quinto país más violento del mundo, pero la explicación es sencilla, la región es la primera. Honduras, El Salvador, México, Venezuela y Colombia son países que aportan lo suyo, y si hablamos con amigos nicas y ticos también tienen su flagelo.

La vida cada vez vale menos, los niños cada vez se impactan menos con la muerte, y el adulto es cada vez más indiferente con el dolor ajeno.

Para los cristianos, este es un claro momento de reflexión, estamos frente a un aniversario más de la solemnidad para recordar quién vino y venció la muerte. Si usted no cree en ello, entonces crea en la bondad de su corazón y en la necesidad de modificar esa triste tolerancia frente a la violencia y la angustia del otro.

Miles de cucuruchos cargarán a nazarenos y santos entierros, otros miles verán por las calles pasar esas andas que invitan a la reflexión y al análisis sobre el significado cristiano en las familias, otros tendrán su momento con los suyos y profesarán lo que su fe les brinda, y otros estaremos en centros turísticos y de descanso; sin embargo, en uno u otro lugar debemos saber comprender que estas fechas tienen un claro sentido y alcance.

Cristo dejó un nuevo mandamiento: “amar al prójimo como a uno mismo”; sin embargo, es mentira que debemos flagelarnos para vivir un tanto siguiendo ese mandato. Acá, cada vez hay más pérdida espiritual, cada vez la familia pesa menos y, sobre todo, el egoísmo y consumismo nos carcomen el tuétano de nuestra existencia.

Escojamos el significado, pero mientras creamos que solo nuestro pensamiento es el único que debe prevalecer en esta tierra, de plano, la paz será lírica e inalcanzable.