TIEMPO Y DESTINO
Sobre los hijos de gobernantes
Varios analistas hablan con entusiasmo de la inminente caída del presidente de Guatemala, Jimmy Morales, cuyo Gobierno se tambalea —dicen— por los señalamientos de corrupción formulados por el Ministerio Público y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala, contra uno de sus hijos, y uno de sus hermanos.
Si esos analistas acertaran, Guatemala estaría agrandando la lista de presidentes sacados del poder antes de terminar sus períodos, siete militares y un civil, comenzando a contarlos desde octubre de 1944. Y nada extraño sería que al término de este siglo el número de derrocados llegue a 12. Tal es la situación de la Presidencia en Guatemala.
Pero, veo un apresuramiento inapropiado en los pronósticos de una caída inminente del actual mandatario porque los delitos, sea cual fuere la naturaleza de estos, son hechos personalísimos y no se contagian por el parentesco.
Algunos hijos de gobernantes y reyes ayudan mucho a sus padres. Otros hay, que les causan problemas. Pero, son estos los que se enfrentan a la justicia, no sus padres.
En España, la infanta Cristina, hija del rey Juan Carlos, y hermana del rey actual, Felipe IV de España, es procesada por hechos que las autoridades judiciales de ese país consideran delitos. El fiscal pide para ella 19 años de prisión y 26 para el marido.
Hace algunos años, el hijo de un ministro inglés incurrió en hechos aparentemente ilegales y el padre personalmente lo entregó a la justicia. El ministro recibió aplausos.
Según información que aparece en el blog Cambios en una era Siglo XXI, bajo la firma de Jorge Guldenzoph, sitio del que tomo algunos datos, un policía londinense encontró tirado en una calle, completamente borracho, a un menor de edad, hijo del primer ministro laborista, Tony Blair. Surgió el escándalo y Blair respondió a sus críticos, así: “En algunas ocasiones ser primer ministro resulta difícil. Pero, ser padre es probablemente más difícil”.
Seguidamente los padres manifestaron su disposición de cooperar en la investigación, y su decisión de acompañar a su hijo cuando se le citara a declarar.
Noelle Bush, de 24 años, sobrina del presidente de los Estados Unidos, George W. Bush fue encarcelada durante 72 horas por violar los términos de un programa de tratamiento contra las drogas ordenado por un juez.
Dos hijos del presidente de Korea del Sur, Kim Dae-Jung, fueron detenidos y procesados. Uno por haber recibido millones de dólares a cambio de intervenir para facilitar negocios con el Estado a varios empresarios y, el otro, por corrupción y tráfico de influencias.
El presidente presentó disculpas a su país por el comportamiento de sus hijos.
En Guatemala uno de los problemas que afligen a la magistrada Blanca Aída Stalling Dávila se origina en su hijo, acusado de sobornar a funcionarios judiciales; y la expresidenta del Organismo Judicial, Beatriz Ofelia de León, es procesada por intentar proteger a su hijo, acusado por la desaparición de su esposa, Cristina Siekavizza.
Lo más impresionante, sin embargo, ha sido el suicidio del magistrado de la Corte Suprema de Justicia, César Barrientos Pellecer, hecho al que algunas personas ligan al caso de un hijo del magistrado, procesado bajo el cargo de trata de personas.
Finalmente es necesario puntualizar que en ninguno de los casos antes citados se abrió proceso a los padres. De manera que si el presidente Morales cae —lo cual hoy por hoy me parece imposible— sería por otros motivos, uno de ellos haber querido con un proyecto de reforma tributaria tomar al toro por los cuernos.
Las prisiones están atiborradas de corruptos y corruptores; pero, siempre tendrán lugar para otros más. Lo ideal sería, sin embargo, que algunos de esos centros comenzaran a ser cerrados en el supuesto de que la delincuencia administrativa disminuyera.