El documento refiere que no se prevén cambios en la política monetaria ni en la estabilidad en la banca central. No obstante, sugieren que la recién electa administración tendrá el reto de mantener un crecimiento económico sostenido.
La calificación crediticia del país podría aumentar si las nuevas autoridades implementan una agenda de cambios que fortalezcan las instituciones públicas, disminuyan la escala de inseguridad y violencia, propicien mejores perspectivas de crecimiento económico y fortalezcan los recursos fiscales.