Por segundo día consecutivo el himno nacional de Guatemala se escuchó en Xalapa, la capital de Veracruz, donde se disputan las competencias de pentatlón moderno; y ayer, de la mano de Ximena Diéguez y Sophía Hernández, se consiguió el segundo oro para el país.
En esta misma sede se efectúan las competencias de tiro, donde el domingo pasado Jean Pierre Brol ganó el metal dorado en el foso olímpico. Emocionadas por haberle ganado a la pareja mexicana se mostraron las atletas nacionales Ximena y Sophía, quienes en la modalidad de relevos femeninos dieron otra alegría al país. La medalla de oro fue muy peleada con las locales Tamara Vega —plata en individual— y Elena Nogueda, quienes vieron cómo las guatemaltecas conquistaban lo más alto del podio en tierras veracruzanas.Pareja
La pareja de nacionales se tomó la revancha de la prueba individual, donde no pudieron entrar a la pelea por las medallas el sábado recién pasado, por lo que ayer, desde el inicio, se mentalizaron en tomar la mayor ventaja posible.La estrategia
“Desde el principio veníamos con la mentalidad de ganar, dimos todo lo que pudimos y al llegar a la prueba combinada estábamos en primer lugar. Fue una competencia muy reñida para conseguir esta nueva medalla”, expresó Diéguez.En la primera prueba, que fue esgrima, las guatemaltecas fueron superiores a sus rivales, donde también compitieron las cubanas Laura Moya –oro en individual-, Mercedes Camara, así como las panameñas Evelyn NG y Ana Rodríguez.”Gracias a Dios nos combinamos como pareja. Cuando una caía, la otra la levantaba; así pudimos tener un buen punteo, que al final nos ayudó. Sophi cerró en la prueba combinada de una manera espectacular y eso nos ayudó. La clave fue confiar una en la otra, pues veníamos a participar por un país e hicimos un buen equipo desde el inicio”, agregó Ximena.Diéguez y Hernández finalizaron con 19 victorias contra cinco derrotas, lo que les dio el liderato de la competencia. En natación no tuvieron un buen desempeño y fueron relegadas por las aztecas y las cubanas.Las nacionales finalizaron segundas en equitación, por lo que la ventaja se reducía poco a poco. En la última prueba, el apoyo hacia las mexicanas fue total por parte del público que llegó en buen número al estadio Heriberto Jara Corona, que en todo momento alentaron a sus participantes.El cansancio empezó a afectar a las guatemaltecas, que vieron cómo las mexicanas cruzaron la meta en primer lugar, por lo que aceleraron el paso para reducir el tiempo y al final consagrarse como las campeonas centroamericanas y del Caribe.”Es un regalo de Dios y me siento muy bendecida, pues veníamos concentradas en ganar la de oro. Trabajamos por mucho tiempo y solo teníamos que ponerlo en práctica, y disfrutamos de la competencia. El trabajo se hace en el entreno y solo venimos a recoger la medalla”, resaltó la seleccionada.