Estados Unidos se encuentra en un dilema sobre las etiquetas en los paquetes de carne que indican de dónde provino el producto, luego que la Organización Mundial de Comercio falló a favor de Canadá y México en que los avisos son discriminatorios.
Una ley del 2008 estipula que todo corte de carne fresca empaquetado debe llevar una etiqueta indicando dónde nació, se crio y fue sacrificado el animal.
Por ejemplo, la etiqueta debe decir carne de animal “nacido en Canadá, criado y sacrificada en EEUU” o “nacido, criado y sacrificado en EEUU.”
La Organización Mundial de Comercio más de una vez ha fallado a favor de Canadá y México en que las etiquetas le dan una ventaja a Estados Unidos. En un fallo del 20 de octubre, la OMC falló que las etiquetas obligan a las empacadoras de carne a separar y llevar registros detallados de la carne, lo que les da un incentivo para preferir el producto estadounidense.
La organización falló en el 2011 que una versión anterior de las etiquetas era discriminatoria. Estados Unidos apeló, pero el fallo fue confirmado en el 2012.
Un portavoz del representante comercial estadounidense, Michael Froman, dijo que Estados Unidos no ha decidido si apelará la decisión más reciente de la OMC. Si esa decisión se mantiene, Canadá y México podrían tomar represalias contra Estados Unidos e imponer sanciones comerciales si los avisos no son modificados o eliminados.
El secretario estadounidense de Agricultura, Tom Vilsack, cree que el Congreso debe modificar la ley, o que México y Canadá deben llegar a un acuerdo con Washington.
“Al parecer no hay una solución regulatoria que haga que esta norma se adapte a la decisión de la OMC y además que cumpla con la ley aprobada por el Congreso“, declaró Vilsack en un comunicado.
Canadá y México deben decirle a Washington “de una manera más clara y más específica cuál, si es que alguna, versión de esto será aceptable para ellos“, dijo Vilsack la semana pasada en un evento en Kansas City, Missouri.