En este contexto, Dalli anunció un conjunto de medidas para combatir el problema, que cada año causa en los 27 estados miembros unas 25 mil muertes y supone un coste de €1 mil 500 millones.
Las medidas se centran en promover “un uso apropiado” de los antibióticos, prevenir las infecciones y contagios causados por microbios, desarrollar alternativas a los antibióticos actualmente utilizados y reforzar la cooperación con terceros países y organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud, explicó Dalli.
En el lado positivo, el informe señala un descenso de la resistencia a los antibióticos del estafilococo áureo, responsable de varias infecciones en la piel y en las mucosas.