Ella ha escrito la mayoría de las letras del nuevo álbum, que también ha producido junto a su hermano mayor Rollo Armstrong, fundador de Faithless.
“Fue una grabación muy divertida, ya que no tenía ninguna presión y todo resultó natural y fácil”, dice Dido, quien reconoce que en trabajos anteriores “hubo días verdaderamente complicados”, en éste no.
La cantante contó con la colaboración de Brian Eno, Jeff Bhasker, Rick Nowels, Greg Kurstin y Rollo Armstrong en varios estudios caseros a ambos lados del Atlántico.
“Escribí todo el álbum antes de quedarme embarazada y buena parte lo grabé durante el embarazo. Es divertido recordar las sesiones de grabación, porque mientras cantaba sentía que el bebé me daba puntapiés”, rememora la cantante, que dedicó el último año a su nueva familia.
Este cuarto trabajo toma su título de una de las canciones favoritas de Dido y resume sus últimos años, cuando decidió hacer una pausa en su carrera para formar una familia y grabar un álbum del que sentirse orgullosa.