“Comenzamos con cámaras semiprofesionales, a las cuales les tratamos de sacar el jugo. Luego nos fuimos entusiasmando más e involucrando en este mundo, tomando muchas fotos”, comenta Illescas, quien estudia Ciencias de la Comunicación en la Universidad Rafael Landívar.

El joven empezó a recibir apoyo de sus catedráticos, al igual que sucedió con Castillo, quien cursa Diseño Gráfico en la Universidad San Carlos de Guatemala. Con el paso del tiempo y aprendiendo como autodidactas —además de las clases que recibían en sus casas de estudio—, los amigos decidieron formalizar el proyecto.

“Queríamos darnos a conocer y decidimos mostrar lo que hacíamos bajo un solo nombre”. Castillo empezaba a estudiar francés y se le ocurrió el nombre de Photo Et Art, que significa fotografía y arte.

ABIERTO A TODOS

Photo Et Art siguió creciendo, dedicándose a la fotografía comercial y publicitaria, con especial enfoque en modas; y sabiendo que aún les quedaba mucho por aprender, sus fundadores pensaron en unirse a más personas para compartir conocimientos.

Para esto, contactaron a gente con experiencia para que les enseñaran, y a cualquier aficionado que quisiera unirse a sus reuniones de fotografía.

“Recuerdo que veíamos anuncios para cursos, cuya inscripción tenía precios de Q700, por ejemplo, y no podíamos costearlos, entonces decidimos contactar a gente con más experiencia como Sergio Alvarado, Víctor Reyes, César Santizo y Andrés Lorenzana, para impartir talleres con precios módicos, donde no recibíamos nada, sino que servía para el alquiler del lugar, la impresión de gafetes, la gasolina de los maestros y ese tipo de cosas”, señala Illescas.

LAS REUNIONES

A finales del año pasado, Photo Et Art convocó a la primera reunión de fotografía, que se llevó a cabo en el entonces Noa, en la zona 1. Luego se efectuó una al aire libre, en Antigua Guatemala, y el 27 de abril último tuvo lugar el tercero, en el bar Metro, en la zona 10, ambas con bajo costo.

Los talleres también tienen el apoyo de personas que se prestan para ser fotografiadas, generalmente modelos que están empezando su carrera, además de maquillistas que sin costo ofrecen sus servicios para las sesiones de fotos.

“Este es un proyecto con el que no pretendemos lucrar y en el que al final todos salimos ganando. Los fotógrafos practican, las modelos reciben fotos para crear su portafolio y nosotros quedamos satisfechos al saber que podemos ayudar, porque queremos ver a más jóvenes como nosotros haciendo arte”, agregar Illescas.

Las reuniones de fotografía, asegura, tendrán continuidad cada dos o tres meses, pues la organización requiere cierto tiempo.

Más información sobre los encuentros fotográficos, en Facebook: Photo Et Art.