Turn it up, it’s your favourite song, Dance, dance, dance to the distortion o, lo que es lo mismo, Sube el volumen, es tu canción favorita, baila, baila, baila hasta la distorsión, canta Perry en este tema de reminiscencias claramente disco y referencias en sus letras con posible lectura política.
Cabe recordar que el lanzamiento del nuevo álbum, del que de momento se desconoce su título, se postergó tras la victoria presidencial de Donald Trump en EE. UU., un varapalo para esta artista estadounidense que apoyó explícitamente a Hillary Clinton durante la campaña y que decidió retocar el contenido del disco para hacerlo más acorde con los tiempos.
Su nuevo trabajo es uno de los más esperados de la industria musical internacional, tras el éxito de los anteriores: One of the boys (2008), Teenage dream (2010, que igualó el récord de Michael Jackson de cinco números 1 en las listas de su país) y Prism (que la convirtió en la artista femenina que más discos vendió en 2013).
Previamente, la cantante y compositora de hits como Dark horse, Roar, Hot & Cold o Firework lanzó un disco sin apenas repercusión bajo su nombre real, Katy Hudson (2001).