Escenario

Es momento de salvar vidas

En una fracción pequeñísima de tiempo, una acción fortuita pone en riesgo la vida de una persona en cualquier lugar. Por ello, los padres deben enseñar a sus hijos sencillas prácticas médicas, conocidas como primeros auxilios, que permitan reducir el daño provocado por un accidente y ayudar al afectado.

Gabriel Diéguez, instructor paramédico del Instituto de Formación Integral de la Cruz Roja, encargado de los cursos de Primeros Auxilios, afirma que hay accidentes que se pueden evitar, como, por ejemplo, enseñarle a los niños a no cruzar las calles solos o evitar entrar en la cocina cuando hay productos que pueden causar quemaduras.

Para actuar

Es necesario que los niños aprendan los números telefónicos de las entidades de socorro y que sepan que pueden llamar a estas instituciones en forma gratuita desde cualquier aparato móvil, aunque no tenga saldo.

Diéguez aconseja usar la Cadena de Supervivencia, que empieza por llamar telefónicamente al Sistema Médico de Emergencia (SME), que funciona en todas las entidades de auxilio y que proporciona orientación de qué hacer en accidentes.

La idea es que los niños dejen de ser simples observadores paralizados por el miedo y pasen a ser activos protagonistas que puedan salvar vidas. En esta edición se incluyen algunas recomendaciones que los pequeños de casa —mayores de 5 años— pueden seguir, ante eventualidades.

HEMORRAGIA

Para detener la hemorragia en  alguna parte del cuerpo, colocar en la herida   una almohadilla de gasa o cualquier tela limpia y seca; luego se presiona levemente.

No usar alcohol, agua oxigenada ni merthiolate, porque producen  dolor,  queman el tejido sano y dejan cicratiz.

NARIZ

Cuando alguien sangra por la nariz, hay que oprimirle las fosas nasales con los dedos pulgar e índice, por debajo del tabique nasal, donde termina el cartílago, esto propiciará formación de coágulos. Se le dice al afectado que se siente y respire por la boca. Se le tranquiliza, ya que esto reduce el ritmo cardiaco. No introducir en las fosas nasales tapones de algodón, gaza o papel higiénico, tampoco colocar al paciente con la cabeza hacia atrás.

CHINCHONES

Son microhemorragias dentro de la piel causados por un golpe en la cabeza o la frente. Para desinflamarlos se aplica hielo, en periodos de tres minutos, en una bolsa forrada con un paño limpio, para evitar quemaduras por bajas temperaturas. Es un error querer rebajarlos haciendo  presión y masaje con una moneda, como lo hacían los abuelos.

ASFIXIA

Es el ahogo producido por algo detenido en la garganta. Es  común en niños menores de 3 años, que frecuentemente se llevan objetos a la boca. Puede causar paro respiratorio y ocasionar la muerte en menos de cinco minutos.  Para ayudar, rodear  con los brazos al paciente y presionar o comprimir el abdomen,   arriba del ombligo.  El  diafragma se levantará y los pulmones se comprimirán, con lo que   facilita la salida del objeto.

GOLPES

Si alguien cae  al suelo y se golpea la cabeza, lo mejor es no  tocarlo. Hay que hablarle para saber  si está consciente. No se le debe mover, porque puede haber fracturas o traumas en puntos vitales como la medula espinal y  vértebras  cervicales. Tampoco hay que darles agua, porque si necesita  cirugía habrá  que esperar ocho horas, para que el estómago esté vacío.

QUEMADURAS

Cuando hay quemaduras, lo primero que se debe hacer es introducir en agua la parte quemada,  para contrarrestar la temperatura alta de la piel afectada. El  área se protege con un paño limpio que debe humedecerse cada tres o cuatro minutos.  La piel quemada reacciona  produciendo ampollas,  que no deben reventarse  porque el líquido  contiene agua, sodio, potasio y magnesio que  refrescan la piel.  Es un medio de defensa del cuerpo y ayuda a sanar la herida.

DATOS

Teléfonos de urgencias médicas:

122 Bomberos Voluntarios

123 Bomberos Municipales

125 Cruz Roja

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