Aún así, esos éxitos pudieron nunca ver la luz, según confesó la misma cantante en una entrevista a Vanity Fair Italia, en la que habló de un periodo de dudas.
Después del nacimiento de Sasha, segundo hijo de la pareja Piqué-Mebarak, la colombiana vivió una etapa de inseguridad y desconfianza.
“Decidí que en cuanto Sasha fuera lo suficientemente independiente volvería al estudio de grabación. Pero no tuve en cuenta los temores que podrían surgir”, dijo la artista.
Sintió una sensación de abandonar su carrera, señaló. “”Me sobrevino el miedo escénico. Estaba confundida, tuve la tentación de retirarme”.
Pero su esposo, el futbolista del Barcelona Gerard Piqué, le convenció de hacer lo contrario. “Me dijo que nunca me permitiría retirarme. ‘Ahora sal fuera y haz lo que sabes hacer'”, relató. “Tenía razón, yo sólo estaba asustada. Aterrorizada”.
Me enamoré, el éxito más reciente de Shakira, está cerca de las cien millones de reproducciones en YouTube y ha fascinado a bandas como Coldplay.