Escenario

Teatro

¿Le dejó una chiva? ¿una burra negra? ¿una yegua blanca?

Luis Carlos Pineda (1977) tiene 12 años de hacer teatro, empezó a los 15. De los textos escritos por él se ha llevado a escena Ruleta Rusa y ha hecho adaptaciones de teatro para niños y adultos.

¿Qué le deja este año?

Logré hacer varios trabajos importantes como el de dar clases en los talleres de Caja Lúdica y en Correos, junto con Rayuela y formar un grupo bastante satisfactorio. Tuve la oportunidad de ir a Sevilla, a un simposio bajo la dirección de Eugenio Barba. He logrado, a través de mis alumnos y de estos talleres, tener nuevas herramientas para trabajar y estudiar.

La satisfacción de haber montado El tiempo principia en Xibalbá, de Luis de Lión, un sueño que tenía desde hace varios años y se logró con éxito.

Este año dejó pérdidas como la de Ricardo Mendizábal, Antonio Crespo, Marco Augusto Quiroa y Rafael Pineda, mi padre, y que son vacíos que quedan en el arte y al mismo tiempo una herencia y un compromiso más fuerte de continuar con lo que dejaron.

¿Qué hará el próximo?

El plan más fuerte para mí es tratar de tener un taller permanente de teatro con miras a fundar un laboratorio teatral, porque creo que sea el teatro que fuere estamos acostumbrados a hacerlo muy superficialmente, trabajar un mes, dos o tres para un montaje.

Me propongo tratar de hacer una investigación más seria dentro del teatro. También me propongo tener una dramaturgia más sólida, he estado tratando de escribir y quiero seguir con eso.

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Javier Pacheco (1941), uno de los más grandes y prestigiosos actores y directores teatrales del país, se inició en el teatro a los 8 años de edad. Ha impartido clases en la Escuela Nacional de Arte Dramático durante más de 23 años.

¿Qué le dejó el año viejo?

Enfermedades, una operación no muy delicada y casi seis meses de reposo, porque me rompí el Tendón de Aquiles. Además me dejó enfermedades de mis amigos y la muerte de Rafa Pineda.

Por eso me dediqué a hacer cosas livianas que involucrarán reposo. Si se trata de culpar a alguien, digo que es por el año bisiesto que trae mala suerte. ?Que se vaya este año y venga el año nuevo?. Además trabajé dos temporadas para estudiantes, La tercera palabra, y La historia me da risa. Para adultos sólo dirigí el monólogo El baño, que costó seis meses que el actor se memorizara el texto.

¿Qué hará el próximo año?

Tengo fe ciega en este año que vamos a empezar. Me voy a remojar con montes para quitarme el estigma del 2004. Empiezo a ensayar la reposición de la obra El juego que todos jugamos, para el próximo marzo, espero nos vaya bien. También tengo una propuesta para dirigir una obra con el grupo Diez, pero no destapo la olla porque se queda sólo en proyecto. Tengo el sueño de montar la obra Orquídeas a la luz de la luna, espero pueda este año.