Vida

Homenaje póstumo a Pruden Castellanos

Mañana, a las 19 horas, en el Teatro de Cámara Hugo Carrillo del Centro Cultural Miguel Ángel Asturias, se rendirá un homenaje póstumo al "eterno embajador de España en Guatemala", Pruden Castellanos.

pruden castellanos, declamador y poeta.

pruden castellanos, declamador y poeta.

Castellanos nació el 27 de enero de 1929 en Ablitas, Navarra, España.

La Guerra Civil Española le sorprendió en Salamanca y cuando terminó el conflicto bélico, se trasladó a Madrid con su familia, la cual pertenecía al mundo artístico. Por esa razón, desde temprana edad mantuvo contacto con dramaturgos, actores y poetas.

Desde muy joven dirigió prestigiosas compañías de teatro, y su creatividad literaria la plasmó varios periódicos y revistas.

En su juventud viajó a América, continente al que queda ligado profundamente, y hace de Guatemala su segunda tierra. Viajó a Estados Unidos y en el Salón de Las Américas, de la Organización de los Estados Americanos, ofreció un recital poético, con el cual obtiene un rotundo éxito.

Su presencia en universidades y teatros siempre fue bien recibida con entusiasmo por críticos y público.

prolífico

Pruden Castellanos se dedicó al quehacer televisivo con proyección internacional, estelarizó filmes como la recordada producción guatemalteco-mexicana El Hermano Pedro de Betancourt.

De su pluma salieron los libros de versos Nube y viento, Seis pintores y un poeta, Tierra adentro Mar afuera…, El Otoño y Otros Versos, Sendero y huella y Raíz del Alba.

Entró de lleno en la narrativa con la impactante novela Los Estafados, llamado a situarse entre los libros triunfales, ya que, más que la historia de unos seres, una sociedad y un país, cuenta la historia de una larga, violenta y convulsa época: la Guatemala de las décadas de 1960 y 1970.

Su prestigio en el mundo de las letras lo llevó a difundir la literatura de España y América a través de su programa televisivo Acento. Este se convirtió en una cátedra, en el que desfilaron los mejores poemas hispanoamericanos y los más bellos de su inspiración.

Desafortunadamente, en el apogeo de su vida artística, el cáncer le sorprendió en una fase terminal silenciosa. Falleció el 24 de febrero de 1992, a sus 63 años.

Quienes lo conocieron siempre lo recordarán como un hombre íntegro, cariñoso y amigable. Además, como una persona que aún en los momento más difíciles que vivió la colonia española en Guatemala, fue para muchos un bastión de confianza y defensa del honor y la dignidad de su gente y de su origen.