Antes de ir a consulta, se aconseja llevar un diario con los siguientes datos: momento del día en que suele ocurrir la incontinencia, comportamientos o actividades que la preceden o lugar donde la pérdida de control de la vejiga sucede con mayor frecuencia.
Una vez que se hace el diagnóstico, el especialista ayudará a desarrollar un plan de tratamiento adecuado que puede incluir ejercicios simples de la pelvis, que se aprenden rápidamente y pueden practicarse en cualquier lugar, para fortalecer los músculos que ayudan a controlar el flujo de orina.
También se recomienda cambiar los hábitos alimenticios. Hay alimentos que pueden desencadenar o agravar la incontinencia. Asimismo, entrenar la vejiga: restaurar una rutina para ir al baño al aumentar de manera gradual la cantidad de tiempo que se orina.
Se aconseja elegir prendas de dos piezas que se puedan poner y quitar con facilidad y utilizar ropa interior desechable. Para las mujeres, faldas amplias y para los hombres, reemplazar los botones por cierres con velcro. El médico puede recurrir a terapias medicamentosas o quirúrgicas para tratar esta molestia.