Él es muy activo y le gusta mucho el deporte y juega como pícher, por lo que lo seleccionaron para ir a Puerto Rico. Son varios los seleccionados y la mayoría tiene recursos económicos para pagar el pasaje, pero mi hijo no cuenta con esa facilidad. Por eso he pensado que por su medio podría encontrar a alguna persona o entidad que le ayudaran con el pasaje. Ellos allá tienen hospedaje y comida, pero no cuentan con el pasaje.
También hay otros niños del equipo que tampoco tienen el dinero para el pasaje, pero todos estamos viendo dónde nos ayudan. Si por su medio pudiéramos conseguir esa ayuda, le agradeceríamos infinitamente. Rina, disculpe el atrevimiento de buscar esta colaboración acudiendo a su columna, pero yo disfruto tanto ver jugar a mi hijo con tanto entusiasmo, aunque a veces, por lo económico, se le cierran a uno las puertas”.
“Los cristianos sabemos que Dios tiene todo bajo su control y esa es nuestra esperanza. Para cualquier información se pueden comunicar con la Liga Pequeña de Beisbol Arturo Gálvez Sobral, al teléfono 22884820 y su dirección es Avenida Simeón Cañas, final zona 2, Hipódromo del Norte, a un costado del Mapa en Relieve. Mi hijo se llama Darin López Aguirre. Gracias por darme también a mí la oportunidad de exponerle el caso de mi hijo”.
Al conocer casos como este —que no son naturalmente ningún problema—, me vienen a la mente los pensamientos de la Madre Teresa de Calcuta, de aquella sabia mujer, descendiente de una familia rica, cuyo nombre original era Agnes Boiagin. Sus mensajes siempre fueron de esperanza para todos, por ejemplo cuando dice: “Da lo que tienes para que merezcas recibir lo que te falta”. Luego, cuando conozco el caso de un niño de 11 años, lleno de ilusiones y activo beisbolista, cuya madre le inyecta fe y esperanza, me pregunto ¿habrá quien crea en los sueños de ellos y decida apoyarlos? Para responder a esta interrogante me vienen a la mente estos pensamientos que hoy cito, que nos habla al corazón cuando nos dice: Debemos dar lo que tenemos para recibir lo que nos falta. Todos sabemos que cuando ayudamos a los demás nos ayudamos a nosotros mismos.
Aunque en este caso no estamos en una urgente necesidad, como tantos otros publicados en este espacio, es tan importante estimular la inquietud de este niño, que sueña con competir sanamente en un equipo que le ha seleccionado para ir a Puerto Rico. Para Dios no hay nada imposible cuando se pide con fe como lo hace esta madre y algo puede suceder y ese sueño será una realidad. Pensemos que el deporte es el mejor medio para estimular a la juventud y para formar hombres sanos de mente, cuerpo y espíritu. La misión del Ministerio de Cultura y Deportes precisamente es esta.
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