El Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO) analizó cinco dietas de moda y lanzó una advertencia para no recurrir a ellas por el riesgo que representan y eñala que existen regímenes alimenticios que ocasionan efectos secundarios. “Las dietas en las que se consume mucho jugo de limón, se comen exclusivamente frutas, se eliminan todos los carbohidratos o las calorías, solo descompensan el organismo”, agregaron.
En esta edición se incluyen las dietas populares que IMEO desaconseja para bajar de peso.
Solo frutas
Las dietas de la manzana o la piña se volvieron populares luego de las fiestas de fin de año, gracias a sus propiedades diuréticas y depurativas.
“Estas son frutas que no contienen proteínas, por lo que a la hora de perder peso eliminaremos principalmente masa muscular y no grasa”, dijo Estefanía Ramo, dietista de IMEO.
Una alimentación en la que solo se consumen frutas es perjudicial para mujeres con menopausia, personas de la tercera edad o pacientes con alteraciones hormonales.
Mucho limón
Aunque la dieta del limón promete bajar una talla en menos de una semana, consumir en exceso este jugo ácido obliga al organismo a gastar oligoelementos (oxígeno, hidrógeno, carbono y nitrógeno). La carencia de estas sustancias predispone a padecer diabetes, hipertensión y anemia. El daño es mayor en personas que padecen reflujo, ácido úrico elevado o estreñimiento.
Además, el famoso efecto rebote —recuperación de libras perdidas— es casi seguro, pues el organismo se descompensa.
Batidos multivitamínicos
Alimentarse solo con jugos multivitamínicos es un grave error. “Estos licuados contienen vitaminas y minerales, pero cantidades muy reducidas de proteínas y grasas, lo que ocasiona perder masa muscular y provoca hipervitaminosis —excesiva acumulación de vitaminas—”, expone el IMEO.
Al ingerir la fruta y la verdura trituradas, se omite la masticación y la insalivación, una parte del proceso digestivo que puede influir en el efecto de saciedad, de modo que su ausencia acentuaría la sensación de hambre.
Limitación de calorías
Hay quienes no desean hacer ejercicio ni alimentarse de manera balanceada, por lo que deciden consumir menos de 500 kilocalorías al día. Esto causa gran presión psicológica y crea malos hábitos nutricionales.
Una dieta saludable debe incluir 2 mil calorías al día y cinco tiempos de comida —desayuno, almuerzo, cena y dos meriendas—. “Consumir menos de esa cantidad de calorías podría ocasionar deficiencias nutricionales, anemia, osteoporosis, ansiedad y problemas en la piel”, enfatiza el IMEO.
Cero carbohidratos
La dieta menos aconsejable es la llamada “cero carbohidratos” que propone no comer hidratos de carbono —cereales, papas, legumbres, vegetales y fruta—, la principal fuente de energía.
“Lo anterior obliga al organismo a agotar las reservar de glucógeno en el hígado y los músculos. Además, no disponemos de suficiente glucosa en la sangre”, comenta la nutricionista Andrea Marqués.
Los carbohidratos son necesarios para nuestro cuerpo, pero no se deben consumir en exceso.