Salud y Familia

¿Por qué el sentimiento de culpa por nuestros errores está más presente en Semana Santa?

El sentimiento de culpa puede ser omitido aceptando los errores y comprometiéndose a ya no repetirlo. Así como a compensarlo con buenas acciones.

El sentimiento de culpa aumenta cuando se trata de omitir el error. Algunas veces puede convertirse en depresión cuando el sentimiento es mayor. (Foto Prensa Libre: Pixabay).

El sentimiento de culpa aumenta cuando se trata de omitir el error. Algunas veces puede convertirse en depresión cuando el sentimiento es mayor. (Foto Prensa Libre: Pixabay).

Muchas personas se sienten mal cuando cometen actos indebidos, algunos, incluso, pierden el sueño. Pero, con el pasar del tiempo se les olvida o aceptan su error y se arrepienten. Sin embargo, en Semana Santa, el remordimiento vuelve o aumenta porque en estos días se conmemora la pasión y muerte de Jesús para salvar a la humanidad de los pecados cometidos.

Alejandra Gutiérrez, psicóloga clínica con experiencia en desarrollo personal, comenta que cuando se lleva a cabo un acto indebido o que no se alinea a los valores y moral de la persona se activa el remordimiento de conciencia. Luego la culpa se hace presente y cada vez “es más pesada” hasta que se acepta el error.

“Hasta que no se acepta el error no disminuye el sentimiento de culpa. Si tratamos de ignorarlo se hace más pesado y nos quita la tranquilidad porque en nuestra cabeza solo tenemos el pensamiento de que fallamos, de que cometimos ese error. Por eso, lo mejor es aceptarlo y arrepentirse”, opina la profesional.

Cuando el sentimiento de culpa llega a ser excesivo puede causar desequilibrios emocionales como depresión. La culpa se convierte en el principal obstáculo para ver la realidad de la situación y considerar que no merece ser perdonado ni ser feliz. Según la experta, lo que se necesita es reeducar el comportamiento, mejorar las relaciones con el entorno y buscar el perdón (tanto de usted como mismo de los demás, si es que su error dañó a alguien más).

En Semana Santa

La Semana Santa es la conmemoración de la pasión, muerte y resurrección de Jesús. Para el pastor evangélico Carlos Ruíz es importante recordar que Jesús pagó por los pecados de la humanidad al morir físicamente en la cruz del calvario, por eso a muchas personas les aumenta el sentimiento de culpa en estos días, porque consideran que nuevamente Jesucristo sufre por ellas, por los errores que han cometido.

Recordar la pasión y muerte de Jesús podría aumentar el sentimiento de culpa en Semana Santa. (Foto Prensa Libre: Pixabay).

“La Cuaresma es la preparación para la Pascua, es un tiempo de reflexión. En estos días cada uno se prepara para conmemorar la pasión, muerte y resurrección de Jesús. Varias personas piensan más en los pecados que han cometido y se culpan, pero no debe ser así. Este es un momento para vivir con mucha fe y sentirse perdonados, porque por eso murió Jesucristo en la cruz, para perdonarnos”, comenta el sacerdote Hugo Estrada.

Según Estrada, es importante estar consciente de las fallas que se han cometido y arrepentirse. Aceptar el perdón y comprometerse a ya no volver a cometer ese error son las principales acciones para ir liberando el sentimiento de culpa para vivir con tranquilidad.

¿Cómo combatir la culpa este año?

Para el guía espiritual y maestro católico Julio Menchú, muchas personas tratan de aliviar su culpa participando en las diferentes actividades que se llevan a cabo en Semana Santa, como procesiones, liturgias, entre otras. “Algunos deciden acompañar una procesión desde que sale de la iglesia, hasta que entra. Ese es su método de penitencia o para pedir perdón, incluso para mostrar agradecimiento a Jesús por las bendiciones que se han recibido en durante el año”, comenta.

Sin embargo, este año, debido a que las iglesias suspendieron actividades presenciales como medida para combatir la propagación del covid-19, la Semana Santa será inusual.

La culpa puede aumentar si se trata de omitir. Para calmarse puede orar y arrepentirse, así como comprometerse a no volver a cometer el error. (Foto Prensa Libre: Pixabay).

Según Menchú, ya que este año no se podrá participar físicamente en las actividades a las que se está acostumbrado, puede ser una oportunidad para “vivir verdaderamente la Pascua” y pensar en los más necesitados. Por ejemplo, ayudar a las personas que  han sido afectadas económicamente por el toque de queda u orar por los médicos, enfermeras y todas las personas que están en la primera línea de defensa contra el covid-19.

“En las procesiones del Jueves y Viernes Santo se ve más gente que en la del Domingo de Resurrección. Muchos nos quedamos con ese Jesús muerto y eso es un error. Esta Semana Santa podría ser diferente hasta en eso y pensar en los más afectados. Si podemos ayudar a alguien que depende de la economía informal o que se ha quedado sin trabajo, podríamos encontrar el verdadero significado de la Semana Mayor”, opina Menchú.

Independientemente de las creencias religiosas, la Semana Santa tiene una connotación espiritual que invita a la reflexión, a practicar la solidaridad, compresión, empatía, respeto y caridad, señala Menchú. Entonces, si usted tenía destinado un presupuesto para viajar durante estos días, podría utilizar un porcentaje para ayudar a los demás.

“Además, si usted es más religioso, hay muchas iglesias que transmiten sus actividades por diferentes plataformas. En la página Rezando Voy, un proyecto de oración de la Compañía de Jesús en España, comparte el evangelio del día y oraciones. Hay materiales para la niñez. Esto puede ayudar a tener mejor reflexión y evitar la depresión de Semana Santa”, concluye.

ESCRITO POR:

Andrea Jumique Castillo

Periodista de Prensa Libre especializada en temas de salud, bienestar y cultura, con 5 años de experiencia.