Es un proceso positivo, dinámico y participativo en que se debe promover el diálogo y solucionar los conflictos con un espíritu de entendimiento y cooperación mutuos.
Pero, en el interior se define con una sensación de calma en la que dejamos de luchar contra los pensamientos negativos.
Percibir la paz
En canales mundiales de reconocidos personajes se encuentran diferentes pensamientos sobre la paz. “No sé si lo que percibe el ser humano es la felicidad o la paz interior, diría que la “clave” sería estar dispuesto a la pérdida y aceptar que voy a perder cosas, que el mundo no se va a acoplar a mi mente sino yo me tengo que acoplar al mundo”, dice el psicólogo Walter Riso.
“La paz interior está cuando yo entiendo que todo es transitorio”, agrega Riso. En ese momento se reconoce que es tiempo de seguir.
“Desde mi perspectiva, el crecimiento interior es que sea más yo porque cuando descubro quién soy todas las cosas encajan”, dice Daniel Gabarró, maestro, psicopedagogo, licenciado en humanidades, con un diplomado en Dirección y organización de Empresas.
“Si me centro en evitar el sufrimiento va a ser un desastre. Voy a avanzar solo cuando me atreva a ver la verdad y buscar comprender, si sufro es porque no he comprendido la totalidad de las cosas”, agrega.
Aclara que el trabajo interior comienza a nivel psicológico y también hay una parte espiritual a trabajar.
La calma a diario
Este domingo 24 de septiembre, Didi Hemlata Sanghi, de India y residente en Trinidad y Tobago, así como el mexicano Ernesto Castellanos participarán en una actividad para hablar sobre la pureza del ser en la Universidad Espiritual Brahma Kumaris, que está ubicada en Mixco.
Ambos han trabajado por el tema de la paz en el mundo. Hemlata es una médica de profesión que se ha dedicado al servicio de la espiritualidad y Castellanos tiene un posgrado en economía y estudios internacionales y ha estado por más de 40 años al servicio en la organización.
Hemlata recuerda que cuando entró en contacto con la organización se consideraba alguien con falta de paz, con muchas preguntas y tenía mucho estrés. Al entrar a tomar el curso de meditación tenía un sentimiento de calma, no sabía con certeza qué pasaba porque no entendía el sentirse así, sentía que era demasiado lento para su ritmo de vida.
Después de un tiempo decidió dedicarse a este ritmo de vida que le ayuda incluso a concentrarse mejor en sus actividades diarias. Vinieron mucho retos, no siempre todo salió bien, pero empezó a tener menos temor en su vida.
Al preguntarle cómo actuar en paz cuando hay historias tan duras en nuestros contextos explica que la paz no debe ser de afuera hacia adentro, sino de adentro hacia afuera. “Todo el mundo quiere la paz para que termine la guerra, pero la paz debe venir desde el interior”, expresa.
“Otras organizaciones y nosotros estamos trabajando en nosotros mismos y debemos reconocer que somos una energía pacífica, si empezamos por lo menos un dos por ciento de paz en nosotros un porcentaje del mundo será pacífico”, expresa.
“Para vivir en paz, trate de no depender de nadie y al mismo tiempo trate de ayudar a otros que no dependan de usted. Ayúdelos haciéndolos independientes, libres y responsables de sus vidas. En la misma forma, asegúrese de no causar pesar a nadie, y que otros no sean fuente de sufrimiento para usted”. Universidad Espiritual Brahma Kumaris
“Nosotros como organización nos levantamos a diario a las cuatro de la mañana y estamos creando esa atmósfera de paz para el mundo entero para por medio de la meditación crear esa paz para el mundo”, agrega.
Castellanos fue considerado para formar parte del Comité Internacional que presentó en 1986 el resultado de la iniciativa Un millón de minutos de paz para el mundo, en representación de Latinoamérica, al secretario general de las Naciones Unidas. A partir de ahí, cada tercera semana del mes Brahma Kumaris se dedica a meditar por la paz.
“Veo y visualizo a los líderes del mundo para ver que esa alma pueda ser mejor, hay cosas que no podemos parar y que vivimos a diario…todo eso acarrea malestares y lo vivimos en las calles, sin embargo, podemos en nuestro ámbito interno influir positivamente”, agrega Castellanos.
¿Cómo empezar a meditar?
Anne Bonin, directora de la organización Brahma Kumaris Guatemala, explica que para meditar lo hacen con los ojos abiertos para no distraerse en un vacío. Están conscientes de lo que están pensando y conducir los pensamientos hacia una experiencia.
Es importante concentrar los pensamientos en la paz y observar hacia adentro y tener la experiencia de ser un ser de paz. Es importante crear esa paz y mantenerlo en todo momento, en especial cuando se tienen experiencias externas en el tráfico.
“La meditación es tan sencilla que no creemos es meditación”, dice Hamlata, quien invita a sentarnos tranquilamente y pensar que somos almas sentadas en el centro de la frente.
“En el proceso diario de vida cada hora hacemos un paro de nuestros pensamientos para analizarlos…cuando estoy en una reunión a veces detengo al grupo para observar si estamos logrando hacer lo que queremos lograr”, concluye Castellanos. Él lo define como el control del tráfico de los pensamientos.
Un día de la paz
La página de Naciones Unidas explica que cada año, el Día Internacional de la Paz se celebra en todo el mundo el 21 de septiembre. La Asamblea General de las Naciones Unidas ha declarado este como un día dedicado a fortalecer los ideales de la paz, mediante el respeto de 24 horas de no violencia y alto el fuego. Nuestro mundo necesita la paz más que nunca.
Este año el tema es “Acciones para la paz: nuestra ambición para los #ObjetivosMundiales”. Se trata de un llamamiento a la acción que reconoce nuestra responsabilidad individual y colectiva de promover la paz. El fomento de la paz contribuye a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), y alcanzar dichos objetivos creará una cultura de paz para todos.
El Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, ha declarado que “la paz es más necesaria que nunca. La guerra y los conflictos están provocando devastación, pobreza y hambre y desplazando a decenas de millones de personas de sus hogares. El caos climático afecta a todo el planeta e incluso los países en los que reina la paz se ven sacudidos por enormes desigualdades y polarización política”.