Pero no hay que ilusionarse, sin embargo: la computadora no es barata, ya que cuesta unas 3 mil euros, pero al menos sus creadores publicaron un manual de instrucciones para una versión algo más accesible, según reportó la revista Wired.
Además de los Lego, los ingenieros usan los circuitos de las computadoras llamadas Raspberry Pis, que corren con Linux. Se trata de miniordenadores del tamaño de una tarjeta de crédito, desarrolladas en Gran Bretaña para estimular la enseñanza de informática básica en las escuelas.
Simon Cox, el jefe del equipo, explicó que su equipo querían volver accesible la computación a los amantes de los hobbies, sobre todo a los niños como su hijo James, de apenas seis años.
“Nuestro objetivo es lograr que algún niño diga: “Esto está bueno, mamá y papá, puedo intentarlo”.