Vida

Una temporada provechosa

Llega el fin de año y con este la oportunidad para que muchos jóvenes se empleen temporalmente a fin de tener una fuente de ingresos que les permita cubrir sus gastos, ayudar a sus padres, o bien ocupar su tiempo en alguna actividad que consideran productiva.

Trabajar como vacacionista es una experiencia enriquecedora.

Trabajar como vacacionista es una experiencia enriquecedora.

Según datos del Ministerio de Trabajo y Previsión Social, tres de cada 10 jóvenes del sector educativo público y uno de cada 10 del privado, entre los 17 y 24 años, buscan trabajo en estos meses.

Las empresas prefieren contratarlos para puestos que requieran muy poca o ninguna experiencia y en los cuales se les pueda capacitar fácilmente.

La actitud innata del joven permite al empresariado interesarse en su contratación para aportar habilidades y competencias, explica Egor Stuert Espinosa, gerente de País de Manpower.

Las compañías que suelen contratar vacacionistas son comercios en centros comerciales, supermercados, tiendas de celulares y electrodomésticos, call centers y restaurantes. Los trabajos idóneos para ellos son de promotores de ventas, impulsadores, representante de servicio al cliente y vendedores.

Ventajas

Espinosa asegura que para muchos jóvenes es su primera experiencia laboral, lo que les permite conocer el mercado de trabajo y prepararse para otros empleos futuros.

“Este es mi primer empleo. Me gusta trabajar como oficinista porque aprendo, y espero que cuando salga del colegio me pueda unir en forma definitiva a la empresa”, explica Mayra Donis, de 17 años, quien el próximo año se graduará de bachiller en Ciencias y Letras. Mayra consiguió el trabajo luego de haber participado en la Feria de Empleo para Vacacionistas, organizada por el Ministerio de Trabajo en octubre último, pero antes había consultado redes sociales e internet.

La temporada permite a los vacacionistas poner en práctica habilidades como manejo de resolución de conflictos e interacción personal.

La responsabilidad de sentirse seleccionados y que su labor sea recompensada, valorada y exaltada los hace más seguros de sí mismos y que sus capacidades sean mejor enfocadas según su perfil, dice Espinosa. Cuando comienzan sus estudios en la universidad se enfocan en la posibilidad de una ubicación laboral permanente.

Perfil

Las empresas buscan jóvenes con capacidad rápida de aprendizaje y con energía para que puedan desempeñar bien su labor y con entusiasmo. Asimismo que sean proactivos, responsables, puntuales, colaboradores y honrados.

Más que un perfil, las compañías eligen a quienes muestran una excelente actitud de servicio, afirma Espinosa.

¿Solo importa la apariencia?

Seleccionar a alguien por su imagen puede ocurrir en algunas ocasiones, ya que muchas empresas los buscan para plazas de contacto con el público, por lo que necesitan colaboradores que cuiden su apariencia. No obstante, se realiza el proceso de selección en el que se elige al más apto para el puesto, pero no se puede negar el impacto de una “primera buena impresión”, refiere el Ministerio de Trabajo.

La apariencia es un punto extra, según el objetivo de la plaza; por ejemplo, si se trata de promocionar productos, pero siempre depende de la tarea y del sistema de compensación, indica Espinosa.

Preparación

De acuerdo con las empresas que contratan y reclutan personal, un joven que busca trabajo debe tener una buena actitud ante la búsqueda. También debe presentar una hoja de vida adecuada y sobria, prepararse para las entrevistas y tener listas las respuestas a las preguntas que le puedan plantear, como, por ejemplo, aprender a definirse en pocas palabras, recopilar información sobre la empresa y el puesto al que aplica, cuidar su imagen personal y adecuarla al puesto que solicita.

Después de la contratación, se aconseja siempre sentirse motivados con lo que hacen y que mantengan el carisma que les ayude a sentirse seguros durante toda su vida.

“En lugar de pasar mis vacaciones frente a la computadora o el televisor, es mejor trabajar y comenzar a ser independiente. Se siente bien tener tu propio dinero y comprar las cosas que más te gusten”, expresa Mayra.

No hay que olvidar que el salario que devenga un vacacionista es el mínimo: Q71.40 diarios más Q250 de bono mensual, para la agricultura y actividades no agrícolas, y de Q65.63 diarios más Q250 de bono mensual, para maquila. Es importante que las jornadas no sean extensas o que tengan horarios flexibles.

Dato

17  a 24 años es el rango de edad de los vacacionistas.

25 mil jóvenes buscan cada año  empleo  en la capital.

ESCRITO POR:

Brenda Martínez

Periodista de Prensa Libre especializada en historia y antropología con 16 años de experiencia. Reconocida con el premio a Mejor Reportaje del Año de Prensa Libre en tres ocasiones.