REGISTRO AKÁSICO

Respeto a los procesos políticos de cada país

|

La adhesión a la democracia se expresa en el reconocimiento de los resultados electorales. No es un asunto menor, respetar la decisión expresada por un ciudadano ante una boleta electoral. Sin interferencia, la soledad de la mesa resguardada sirve para tomar la decisión. Ese acto, llena de convicción a todos los partidarios de la soberanía popular.

Los intervencionistas extranjeros, los recalcitrantes de la derecha, los fascistas y toda la caterva de serviles a los poderosos, siempre protestarán cuando el resultado es desfavorable a sus intereses. Ningún país extranjero debiera pronunciarse sobre procesos electorales si no ha participado invitado en los preparativos y observación del recuento. Las declaraciones hostiles provienen de calumnias y no dicen nada sobre lo acontecido.

En Venezuela existe un probado proceso de comicios con un alto grado de certeza y confianza. Para comenzar, los resultados son inmediatos. Una red de mesas computarizadas, comunican de manera directa los votos, se garantizan los números. También se genera una constancia en los centros de emisión. La máquina de votación de diseño especializado, genera una boleta de papel para confianza del emisor que se resguarda por parte de las autoridades de cada mesa. Al final, la constancia debe coincidir con lo anotado digitalmente. De esa cuenta, los resultados finales no tienen espera, salvo para confirmar la falta de perturbaciones ajenas al evento.

En las recientes votaciones venezolanas, solo los desvergonzados pueden aducir irregularidades. Los resultados establecen que el Partido Socialista Unido de Venezuela obtuvo 17 gobernaciones, Acción Democrática 4 y la agrupación política Primero Justicia obtuvo 1. Claro, limpio y contundente.

En Zulia, estado ribereño del lago Maracaibo, la contienda ilustra sobre el rechazo a los politiqueros. El candidato de Maduro, Francisco Arias Cárdenas estuvo con Chávez en el golpe, luego se distanció. Ha ganado y perdido la elección a gobernador. Ahora fue derrotado por Juan Pablo Guanipa, un docente universitario y comunicador social que se caracteriza por realizar propuestas concretas para mejorar la situación del estado y del país.

La interpretación en la derrota de Arias Cárdenas del PSUV, refiere necesariamente a la falta de solución de abastecimiento y comercio con Colombia. El cierre de la frontera le ha cobrado con una derrota, a Maduro. Esta afirmación es válida para Mérida y Táchira que han sufrido esa inopinada acción presidencial.

En Anzoategui, Mérida, Nueva Esparta y Táchira, el viejo AD nuevamente gana las elecciones. Fuera de la situación apuntada, Anzoategui es un bastión de los socialdemócratas venezolanos, y Antonio Barreto Sira ha sabido mantener el liderazgo en la Mesa de la Unidad Democrática. En otras palabras, mantener unida a la oposición.

La isla de Nueva Esparta tiene igualmente una oposición unificada y mayoritaria. La victoria de Alfredo Díaz no es ninguna sorpresa. Obviamente supuso trabajo y calidad en la dirigencia.

Mientras tanto, en el resto de Venezuela es claro que la oposición a Maduro está fragmentada, es incapaz y solo busca ganancias personales, azuzando a los desfavorecidos y muchas veces llevándolos a la violencia. La ciudadanía aunque esté descontenta no vota contra Maduro. Saben que la oposición es peor.

Los analistas pueden señalar una mala dirección económica, dirigentes sin preparación. Pero lo que no se puede afirmar es que Maduro no respeta la democracia. Si a un dirigente, el pueblo lo apoya, tiene merecido el cargo. La voz del pueblo es la voz de Dios.

ESCRITO POR:

Antonio Mosquera Aguilar

Doctor en Dinámica Humana por la Universidad Mariano Gálvez. Asesor jurídico de los refugiados guatemaltecos en México durante el enfrentamiento armado. Profesor de Universidad Regional y Universidad Galileo.