Un año después de la drástica caída de afiliados, en junio del 2020 por el impacto de la pandemia, se registra un crecimiento de 146 mil 742 trabajadores (11.9%).
Con respecto a junio del 2019, el crecimiento es de solo 2.6% —35 mil 293 trabajadores—.
Luis San José, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes), explica que el comportamiento puede reflejar que las afiliaciones —que representaría el empleo formal, que paga el seguro social— están volviendo a los niveles anteriores a la caída del 2020.
“Más que todo es una nivelación porque no se está generando tanto empleo nuevo”, dijo.
San José añadió que, de seguir el ritmo positivo en los afiliados, se evidenciaría una recuperación; sin embargo, advirtió que se debe observar si esta se mantiene, ya que en la actualidad se enfrentan riesgos ante la nueva variante delta del coronavirus, nuevas medidas de restricción, pero con una vacunación “muy lenta”. Aspectos que están generando incertidumbre para la operación y contratación de más puestos de trabajo.
Las afiliaciones del sector privado pasaron de 904 mil 71 en junio del 2020 a 1 millón 41 mil 354 en junio del 2021, un crecimiento de 137 mil 283 mil (15.1%), en tanto en el sector público crecieron 2.9% llegando a 336 mil 321 afiliados.
Sin embargo, durante el año pasado, fue el sector público el que se mantuvo en crecimiento constante aún en los meses de mayor impacto de la pandemia.
La comparación por mes refleja que el número de afiliados del sector privado cayó en 14 mil 220 (1.34%) en junio del 2021 respecto de mayo. En tanto el sector público, creció en 717, un 0.2%.
San José mencionó que esa caída podría ser estacional, de algunas actividades que tienen diferente comportamiento de contratación y demanda de empleo durante el año, sin embargo dijo que también pudo deberse al impacto del aumento de contagios en el país, y que podría verse afectada también por la incertidumbre que están generando nuevas restricciones para el mercado laboral próximamente como el estado de prevención que se estableció el 14 de julio, y el estado de calamidad decretado a partir del 15 de agosto.
Expectativa
Lo que genera bastante incertidumbre es la especulación de qué pueda pasar en los próximos meses y generan el problema a sectores, como turismo y otros, a que no pueden contratar a cierta cantidad de personas si no tienen seguros los ingresos para poderlos mantenerlos contratados.
Algunos en algunos sectores podrían verse afectados por las restricciones o nuevos brotes, afectando su liquides y acceso a fondos para poder seguir operando. San José comentó que la Cámara de Turismo de Guatemala ya han mencionado que con las nuevas restricciones de horarios van a tener más problemas para recibir más huéspedes, además los aforos y horarios para eventos y actividades y que se prohibieron los eventos en espacios públicos.
Además, se está por entrar a los meses de mayor movimiento económico (como el último trimestre influenciado por la temporada de fin de año) pero dependerá de cómo se continúe manejando la situación económica del país, agregó.
El analista cree que para finales de año pueda haber interrupción de cadenas de suministro principalmente en Asia, y puede empezar haber problemas de varios componentes y mercancías, con posible subida de precios en general.
