Economía

¿Qué impacto tendrán en el envío de remesas las últimas disposiciones migratorias en Estados Unidos?

La terminación de la política migratoria del Título 42 y la serie de medidas antimigrantes que impulsó el gobernador de Florida, Estados Unidos, no tendrían mayor efecto en el flujo de envío de remesas familiares hacia Guatemala.

Titulo 42 Guatemala

La terminación de la política migratoria del Título 42 y la serie de medidas antimigrantes que impulsó el gobernador de Florida, Estados Unidos, no tendrían mayor efecto en el flujo de remesas familiares hacia Guatemala. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

El 99% de las remesas familiares que anualmente ingresan al país, que representa el 19% del producto interno bruto (PIB), y que se utiliza para el consumo interno, provienen de EE. UU., y todo lo relacionado al tema de la política migratoria tiene una estrecha relación con este indicador.

Analistas consultados por Prensa Libre coinciden en que de momento no se visualiza un efecto negativo para el país en términos de los flujos de transferencias luego de la finalización del Título 42, así como por las medidas contra la migración irregular en el Estado de Florida, donde hay una comunidad importante de guatemaltecos que podría desplazarse hacia otros estados de la Unión Americana.

El asunto migratorio empieza a provocar debate entre demócratas y republicanos de cara a las elecciones presidenciales del 2024 en EE. UU., mientras en Guatemala durante el primer trimestre del año la tendencia de las remesas familiares empieza a desacelerarse -ritmo de crecimiento menor- tal como se había previsto, luego de marcar por 26 meses consecutivo tasas de crecimiento a doble digito, incluso estableciendo récords.

¿Cuál es la lectura?

Cuando se declara alguna medida como la decretada por Estados Unidos muchos de los migrantes irregulares pueden entrar en pánico y temen que puedan ser perseguidos.

El activista Juan Carlos Pocasangre, presidente de la organización Guatemaltecos en Nueva York, explicó vía telefónica que la terminación del Título 42 va a afectar a muchos hispanos, pero para el caso de los originarios de Guatemala, la afectación será muy poca, ya que tienen familiares en Estados Unidos, quienes hacen los sacrificios para poder llevar a sus parientes a ese país, y la mayoría lo hace pagando “mucho dinero”, dándole la vuelta a la frontera, y no se entregan como hace el resto de migrantes de otras nacionalidades.

La mayoría de indocumentados que se entrega explicó Pocasangre, son haitianos, venezolanos, colombianos, africanos, y nicaragüense, que no tienen familiares que puedan apoyarlos financieramente, pero es distinto para un guatemalteco. Se conocen casos en los cuales se paga entre US$10 mil (Q77 mil), US$15 mil (Q115 mil), y hasta US$20 mil (Q154 mil), para que “le den la vuelta” a la frontera.

“Cuando un guatemalteco entra, si se porta bien, empieza a trabajar; envía remesas y eso ayuda mucho. Pero si se entrega en la frontera debe seguir un proceso migratorio que es un poco peligroso, pues el otorgamiento de un asilo es imposible, complicado y un guatemalteco difícilmente puede calificar, ya que eso ocurría cuando estaba la guerra civil. La mayoría de las personas vienen por la falta de trabajo, seguridad o estafa y con eso no califican”, afirmó el activista.

Por lo tanto, su creencia es que los flujos de remesas se mantendrán igual o incluso pueden aumentar en el corto plazo, puesto que se observa el ingreso a EE. UU. de hijos, primos, tíos y otros allegados.

Asimismo, Mario Arturo García, analista independiente en temas sobre remesas y catedrático universitario en liderazgo organizacional y administración de proyectos, comentó que se está viviendo una “coyuntura extraña”.

A su juicio, el Título 42 o el final de su aplicación no producirá dinámicas diferentes; es decir, el gobierno de turno seguirá con sus políticas duras de combate a la migración no documentada. Sin embargo, Estados Unidos atraviesa una desaceleración en su economía que sí puede provocar un crecimiento menor al ingreso de las remesas a Guatemala.

“En los próximos meses recibiremos flujos con menos crecimiento, pero provocando más por variables de coyuntura económica y no por la situación legal-migratoria”, precisó García.

Por otro lado, Pocasangre dijo que hay una clara preocupación en que EE. UU. ha anunciado que Guatemala y Colombia serían los países donde se pedirá asilo, aunque no se ha planteado de manera oficial, pero si se llegará a concretar “habrá migrantes de todo el mundo llegando al país para aplicar esos asilos. Es como una lotería lograrlos, y no sé qué pasaría con tanto migrante para hacer el asilo”.

Con la finalización del Título 42 quedó vigente el Título 8 y nuevas restricciones en la frontera de Estados Unidos.

Redes se aprovechan

Marcel Arévalo, coordinador del programa de pobreza y migración de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), advirtió que, si hay alguna declinación de los flujos de remesas, será muy corta con relación a lo que se recibe en un año, y, por el contrario, seguirá una tendencia del crecimiento.

En todo caso los efectos de la terminación de capítulo 42 incentivará la migración con cierta tendencia, pero “lo más delicado de esto”, añadió, serán los temas de vulnerabilidad, riesgos a otros eventos que les afecten, “y se está manejando que los coyotes, así como las redes criminales, se están aprovechando para asegurar que el fin de este programa facilitará el ingreso -de migrantes-”, cosa que no es cierta.

Arévalo resaltó que ya había información sobre el incremento de viajeros por la acumulación de personas cercanas a las zonas de fronteras, la preparación de misiones humanitarias por el lado mexicano y estadounidense, previendo precisamente la aglomeración de más personas.

Efecto de Florida

Con respecto a las medidas ordenadas en Florida, de la implementación de leyes contra la migración irregular impulsada por el gobernador republicano Ron DeSantis, Arévalo aseguró que tiene que ver con la cuestión electoral, polémica partidaria, y la relación entre demócratas y republicanos, que tiene como tema central la migración.

Recordó que en la Florida hay radicados muchos guatemaltecos. “Cuando se acerca la temporada electoral en Estados Unidos, en este caso el año entrante, la migración es un tema que va a ir creciendo y creciendo, tal como sucedió en la contienda electoral y cada partido hace sus ofertas”, resaltó Arévalo.

Por su parte, Pocasangre contó que, si se llegara a implementar estas medidas en el Estado de Florida, donde hay muchos guatemaltecos, ellos tendrían que salir a otras ciudades. “Lo que siempre hacen por los hijos y sus familiares cuando ocurren este tipo de medidas es que mandan por adelantado todo lo que pueden en remesas, para que aguanten mientras se ubican en otro lugar para insertarse a trabajar”, añadió.

Si las medidas llegan a implementarse en Florida reiteró el activista que esto podría impactar en el largo plazo mientras los migrantes se ubican en otras ciudades, pero según la información que manejan es que hay varias organizaciones que solicitarán a la Suprema Corte de EE. UU. que se impida. “Pero ahora hay mucho temor entre los migrantes que los pueda obligar a salir de ese Estado”, comentó.

Algunas de las medidas que fueron aprobadas y que el texto entraría en vigor el 1 de julio es que que:

  • Se exigirá a las empresas con más de 25 empleados utilizar el E-Verify, un sistema federal para comprar el estatus migratorio de las personas que quieran contratar.
  • Obligará a los hospitales que aceptan el seguro público Medicaid a recabar datos sobre el estatus migratorio de sus pacientes.
  • El transporte de personas indocumentadas desde otro Estado a Florida se convertirá en un delito castigado con hasta 15 años de presión.

Remesas se desaceleran en abril

Durante el primer cuatrimestre del año, las remesas se desaceleraron en 9.8% y se alcanzó un monto de US$5 mil 984.8 millones -unos Q46 mil millones-, según la actualización de la balanza cambiaria.  El año pasado el monto fue de US$5 mil 452.7 millones en el mismo período.

Solo en abril, el ingreso fue de US$1 mil 551.4 millones, y en marzo, US$1 mil 665, que es el monto más alto en lo que va del 2023, en tanto que en febrero fueron US$1 mil 381.1 millones y en enero US$1 mil 386.5 millones.

La estimación de la banca central es que para 2023 el año cierre con US$19 mil 393 en divisas por remesas, y para 2024, en US$20 mil 556 millones.

ESCRITO POR:

Urias Gamarro

Periodista especializado en macroeconomía, finanzas públicas e infraestructura, con 20 años de experiencia en medios radiales, impresos y digitales.