En su onceavo día de paros y bloqueos, las partes involucradas no quieren ceder. El primer día de reuniones auspiciadas por una comisión de la Organización de Estados Americanos (OEA) transcurrió sin mayores avances, mientras la tensión crece en los puntos bloqueados y la desesperación se apodera de los guatemaltecos, tanto los que están a favor como los que están en contra de estas acciones.
Prensa Libre consultó posibles soluciones a diversos analistas, o al menos propuestas que podrían ser pequeños rayos de luz en medio de la oscuridad que ensombrece a la sociedad guatemalteca en estos momentos.
1. Salida del MP
Varios de los analistas consultados coinciden en que cualquier negociación debería incluir la discusión sobre la continuidad de Consuelo Porras al frente del Ministerio Público (MP). El origen de las protestas es exigencia de la dimisión de esta funcionaria junto con la del jefe de la Fiscalía Especial contra la Impunidad (Feci), Rafael Curruchiche, y del juez Séptimo Penal, Fredy Orellana.
Las organizaciones indígenas que se han convertido en el timón de las protestas ciudadanas —los 48 cantones de Totonicapán participa en las reuniones de mediación—, dicen que las renuncias de dichos funcionarios es algo innegociable.
A los tres los acusan de intentar socavar la voluntad ciudadana expresada en las urnas el 25 de junio y el 20 de agosto y con ello de minar la democracia.
El exprocurador de los Derechos Humanos, Sergio Morales, considera que a la fiscal general se le ha otorgado “un poder tan grande que casi anula a todos los poderes del Estado” y que “a la gente no le gusta esa concentración de poder en un solo funcionario”.
Por esa razón, considera, la Fiscalía debe comprometerse respetar los espacios del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y del proceso electoral. “La protesta social ha sido tan grande que es necesario evaluar la continuidad de ella —Porras— en el Ministerio Público, puede llegar a haber hasta fallecidos, y la vida de una persona es más valiosa que la permanencia de un funcionario”, enfatizó Morales.
El analista político Álvaro Pop cree que tener una respuesta urgente a la petición de renuncia “empezaría a resolver la crisis”, y teme que las organizaciones indígenas no estarán dispuestas a aceptar un “no” como respuesta.
2. Postura del presidente
Los entrevistados afirman que el presidente de la república, Alejandro Giammattei, tiene la obligación de tomar en cuenta las peticiones de la ciudadanía, a la vez que lamentan los mensajes que lanzó en los últimos días en lo que pretende deslindarse de cualquier responsabilidad y más bien busca criminalizar las protestas, a raíz de los incidentes violentos que han ocurrido.
Si el presidente pidiera la renuncia de la fiscal sería un paso “importante para calmar los ánimos de la población”, remarca Morales, quien no duda en que Giammattei debe involucrarse en el tema porque él nombró a Porras, a pesar de que tenía otras opciones, por lo que, en parte, es responsable de lo que está ocurriendo.
El mandatario “debe resolver el problema político que hay en el país, es lo mínimo que puede hacer porque él la puso en el cargo”, añadió.
“El presidente Giammattei debe dejar de culpar a los ciudadanos y al presidente electo. Parece que no está midiendo las consecuencias o la lógica de la crisis. Debe asumir una postura en contra del golpe, como se le pide”, precisó Mack.
Ricardo Barrientos, director ejecutivo del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi), añadió que la misión de la OEA podría recomendar a Giammattei dejar de lado el lenguaje “agresivo y confrontativo” ya que puede impactar en las calificadoras de riesgo el amenazar a las organizaciones de sociedad civil con mensajes “parecidos a los de Daniel ortega”.
3. Garantizar el cambio de mando
Algo vital para intentar calmar los ánimos de las manifestaciones podría venir de alguna resolución judicial que garantice que Bernardo Arévalo y Karin Herrera asumirán sus cargos el próximo 14 de enero, ya que existe la percepción muy acentuada en la ciudadanía de que la Feci intenta deslegitimar el proceso electoral para botar el resultado de las elecciones.
Esto nunca ha pasado en la actual era democrática. Cada elección es aceptada dentro y fuera del país y connotados juristas y constituyentes guatemaltecos coinciden en que es imposible hacer un fraude electoral cuando el conteo y resguardo de votos es responsabilidad de la ciudadanía y se hace frente a fiscales. Por lo cual, alterar el resultado implicaría la cooptación a gran escala de más de 100 mil personas.
Pop subraya que debe haber una ruta que garantice el proceso de transición, en donde las cortes, el MP el Legislativo y el Ejecutivo se comprometan a respetar el cambio de mando, de Giammattei a Arévalo. Además, dijo, se tiene que aclarar lo relacionado a la aparente persecución penal que se inició en contra de partidos políticos, pero principalmente de juntas departamentales, municipales y receptoras de votos, ya que “hay una preocupación muy marcada de la ciudadanía en ese aspecto”.
En opinión de Mack, esta garantía podría ser proporcionada por la Corte de Constitucionalidad (CC) que “debería poner en su lugar” al MP para evitar cualquier intento futuro de hacer algo en contra de la transición o del presidente electo.
“Si no renuncian, al menos habría que ponerles un límite”, subraya el analista y sociólogo. De lo contrario, si solo se hace una promesa “la gente se regresará a su cada y la Feci, la próxima semana, volverá a actuar”, advirtió.
4. Permitir tránsito
Otro punto importante para reducir las tensiones es el comportamiento de los manifestantes.
Los bloqueos carreteros ya incomodan mucho a la población que no puede dejar de trabajar. Y lo más preocupante, genera ansiedad por la escasez de productos, gasolina y otros insumos de consumo familiar y diario.
Mack opina que debe hallarse un punto intermedio entre las cámaras empresariales que piden despejar las vías y los manifestantes que las bloquean por completo. Una solución, cree, puede ser el protestar en un carril y dejar el resto de la calle o carretera despejada.
“Esa sería una actitud intermedia, donde se mantiene la movilización, pero no se obstaculiza el paso. No debemos canibalizarnos entre nosotros porque el enemigo no es la gente, sino los que provocaron esta crisis”, enfatiza.
Morales señala que se debe discutir la renuncia de Porras ya que, aunque es importante llamar al buen comportamiento de las manifestaciones, si no se resuelve esta petición hoy, la inconformidad “puede reventar mañana y generar violencia, que es lo que nadie quiere”.
En este sentido, José Andrés Ardón, director ejecutivo del Instituto para la Competitividad Económica, remarcó que lo más importante en este momento es garantizar el acceso de bienes y servicios básicos a la población, lo que implica que “los bloqueos deben permitir el paso inmediato de personal de salud, transporte de mercancías y productos, así como también proteger la infraestructura estratégica en materia de agua y energía.
De igual forma, expuso que se debe garantizar que, quienes laboran en venta y consumo de alimentos, puedan llegar a sus trabajos para garantizar disponibilidad a la población.
Ardón también aboga por hallar una solución definitiva a los bloqueos para que la actividad económica no se deprima. “Esto significa permitir el abastecimiento de combustible en las gasolineras y en el aeropuerto, así como también liberar la actividad portuaria”, dijo.
Propuestas para mejorar economía
Analistas económicos también opinaron acerca de soluciones que podrían ser parte del diálogo que actual.
Hugo Maúl, analista del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (Cien) dijo que la población está cansada de que las oportunidades económicas no crecen al ritmo deseado, a lo que se combina la inefectividad de los gobiernos y las denuncias de corrupción.
Cree que mejorar estos aspectos pasa por reconocer los resultados del proceso electoral y lograr condiciones mínimas para que las autoridades electas ejerzan su periodo presidencial en circunstancias propicias para afrontar la problemática del país y no en medio de situaciones por las que se atraviesan ahora.
Por su lado, Érick Coyoy, consultor de la Asociación de Investigación de Estudios Sociales (Asies), opina que las soluciones al tema económico del país dependen mucho de cómo se aclare el panorama político para 2024 por lo cual “la transición de gobierno es muy importante para cambiar la perspectiva de los agentes económicos de cara al nuevo año”.
“Es importante que el Gobierno dé los pasos para la transición y que la nueva administración pueda sentarse para hacer planes de programación y una ruta de acción que pueda implementar para mejorar la perspectiva y expectativas de estos agentes económicos”, puntualizó.
Mientras que Edgar Balsells, exministro de Finanzas y consultor independiente, dijo que el Congreso tiene la responsabilidad de aprobar un presupuesto que sea acorde con el plan Guatemala no se detiene ya que cuenta con un buen portafolio de infraestructura que se basa en una propuesta que el Banco Interamericano de Desarrollo elaboró a solicitud de Fundesa.
Balsells, además, cree urgente atender la problemática social de la gente ya que en las actuales protestas se ha visto que es población indígena y gente de barrios populares los que muestran mayor inconformidad, por la falta de servicios básicos, viviendas y condiciones dignas de vida.