Durante la conferencia, que tuvo casi dos horas de retraso, Porras tildó de falsos, irresponsables y antidemocráticos los señalamientos hechos en contra de la Fiscalía y que las investigaciones que tienen en curso son parte del “seguimiento a las denuncias presentadas por las víctimas”; además, dijo que lo que se pretende es interrumpir su periodo constitucional al frente del MP.
Porras dijo, además, que este martes se reunió con el secretario general de la Organización de los Estados Americanos, Luis Almagro, a quien le compartió información del qué hacer de la Fiscalía.
El pasado 1 de septiembre, Bernardo Arévalo y Karin Herrera, presidente y vicepresidenta electos, denunciaron un intento de golpe de Estado y aseguraron que el plan de rompimiento constitucional proviene de instituciones como el Ministerio Público, el Juzgado Séptimo de Instancia Penal y el Congreso de la República.
Además, señalaron directamente como responsables de estas acciones a Porras, al titular de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (Feci), Rafael Curruchiche, al juez séptimo de instancia penal, Fredy Orellana, y los miembros de la Junta Directiva del Congreso de la República.
“Hoy se pudo conversar con el señor secretario general de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, y su respectiva comitiva (…) y pudo conocer de la fuente oficial, que es el Ministerio Público, toda la información relacionada con el qué hacer de esta institución”, dijo Porras.
Agregó que se pudo “manifestarle y desvirtuar las informaciones falsas que forman parte de una campaña de desprestigio en contra de la institución”.
“Quiero ser categórica al manifestarle al pueblo de Guatemala que no se dejen sorprender ni engañar por campañas de desinformación, que la única verdad en la que hoy se le dio a conocer al señor secretario general -de la OEA-”.
Agregó que el MP “no es una institución política” y en cambio se dedica a investigar denuncias de víctimas de delitos “por lo que rechazamos categóricamente cualquier señalamiento que pretenda involucrar al Ministerio Público con el resultado del evento electoral”.
“Rechazamos frontal y contundentemente cualquier señalamiento respecto a que se esté formando parte de un proceso de golpe de Estado, como falsamente se ha señalado”, dijo la fiscal, quien agregó que lo que se busca es interrumpir su período constitucional en el cargo.
Además, dijo que lo que se pretende es detener las investigaciones que están en curso, ya que “la función constitucional del Ministerio Público es investigar, por lo que una investigación jamás podría dar un golpe de Estado y menos cambiar los resultados del evento electoral”.
“Estos señalamientos además de ser falsos son irresponsables y antidemocráticos por lo que rechazamos cualquier señalamiento alejado de la función del Ministerio Público como un ente garante del estado de derecho”, reiteró Porras.
Agregó que se le solicitó a Almagro que incluya en su informe que el MP es una entidad con apertura “de brindar cualquier información”.
“Quiero exhortar a todos los sectores del país a sumar esfuerzos desde sus respectivos espacios en favor de la unión, la democracia y la legalidad a fin de continuar coadyuvando al fortalecimiento del estado de derecho, a la democracia y a La Paz social tal y como siempre lo ha hecho el Ministerio Publico”, concluyó Porras.
Las declaraciones de Porras se dan horas después de que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) entregara sus credenciales al presidente electo, Bernardo Arévalo de León, y a su compañera de fórmula, Karin Herrera, quienes asumirán el mando del país a partir del próximo 14 de enero.
“Los magistrados del Tribunal Supremo Electoral se han constituido en un baluarte para impedir los intentos de asalto a la autoridad electoral desde otros poderes del Estado”, reconoció Arévalo de León, durante el acto celebrado en la capital guatemalteca y en alusión a las acciones emprendidas por el MP en contra de su partido, el Movimiento Semilla.
Arremetida judicial
Desde el 12 de julio, la Fiscalía, dirigida por Consuelo Porras, sancionada por Estados Unidos por corrupción, ha buscado cancelar al Movimiento Semilla, partido que llevó a la presidencia a las autoridades electas.
La Fiscalía acusa al partido del presidente electo de un supuesto caso de firmas falsas durante su proceso de creación en 2018.
El lunes pasado inició el proceso de transición de mando con el actual presidente, Alejandro Giammattei, bajo la vigilancia de Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA).
El próximo 14 de enero, Arévalo de León debe asumir la presidencia para el periodo 2024-2028 y se convertirá en el primer gobernante progresista en la historia de Guatemala.
Con información de EFE