Política

Congreso centra críticas en paquete de Q5 mil millones de ampliación presupuestaria

Alianza oficialista impulsa cuestionado dictamen sobre ampliación presupuestaria cuya mayoría de fondos no son para la emergencia por covid-19.

Aún siguen las disputas en los bloques legislativos. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

Aún siguen las disputas en los bloques legislativos. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

Luego de una jornada de críticas y evidente manipulación del dictamen de la iniciativa de ley que contempla una ampliación presupuestaria de Q5 mil 138.9 millones, la sesión plenaria para aprobarla comenzó este jueves con siete horas de retraso.

También se esperaba conocer la ampliación de Q11 mil millones para la emergencia por coronavirus.

Los diputados de la alianza oficialista no consiguieron acuerdos ayer en torno a la ampliación de Q5 mil millones, sobre todo por la forma en la que se dio el dictamen a la iniciativa y más aún porque solo el 8 por ciento de ese monto va dirigido a la emergencia por el coronavirus.

El martes último, en la sesión de la Comisión de Finanzas del Congreso no hubo consensos, y el miércoles la sesión empezó dos horas después de lo previsto. En un principio habían sido convocados sus integrantes a las 15 horas, luego la trasladaron a las 16 horas, pero empezó a las 18 horas.

Al comenzar esa sesión de la Comisión de Finanzas, ya estaba el dictamen favorable y con firmas, por lo que los diputados no confiaron en el proyecto, sobre todo porque hay Q1 millón para el Parlamento Centroamericano (Parlacén), Q20 millones para el Congreso, y Q5 millones para la Asociación de Dignatarios de la Nación de la Asamblea Nacional Constituyente.

Aunque hay acuerdos para anular los renglones polémicos de la ampliación de Q5 mil millones, los congresistas tampoco están a favor de la iniciativa porque solo Q430 millones, equivalentes el 8 por ciento, van para apoyar la emergencia por el coronavirus, y el resto es para deudas o compromisos adquiridos en los pactos colectivos.

Al final, la noche de este jueves se eliminaron del proyecto de ley los rubros que iban para el Parlacén y la Asociación de Dignatarios.

En contra

El diputado Samuel Pérez, del bloque Semilla, criticó la forma en la que se dio el dictamen favorable y abogó por terminar con esas prácticas, pues se genera opacidad.

“No hubo discusión de la iniciativa de ampliación presupuestaria de Q5 mil millones. Les hicieron readecuaciones, pero la discusión no se dio en la Comisión —de Finanzas—. Les pedí que esas prácticas no se den, ya que del resultado de la discusión se debe tener un dictamen”, expuso Pérez.

Asimismo, la diputada Andrea Villagrán, del bloque Bienestar Nacional (Bien), criticó la ampliación y adelantó que su voto será en contra.

“Del total de recursos únicamente se destinarían Q430 millones, 8 por ciento, para el combate al coronavirus, y Q4 mil 708.9 millones, el 92 por ciento, serían para apoyo al presupuesto ordinario del Estado”, explicó.

“El Inde recibiría Q360 millones para subsidiar la tarifa social de la energía eléctrica; el Ministerio de Comunicaciones, Q40 millones, para el remozamiento de infraestructura de salud, y el Ministerio de Salud Pública, Q30 millones, para infraestructura hospitalaria”, añadió la diputada.

Ministro explica detalles

El ministro de Finanzas, Álvaro González Ricci, tuvo que llegar ayer al Congreso para explicar a los diputados la otra ampliación presupuestaria, de Q11 mil millones, recursos que están destinados para apoyar a las familias que sean afectadas económicamente por el covid-19.

La normativa tiene el propósito de establecer los mecanismos para comenzar a mitigar la crisis económica ante la presencia de la pandemia del covid-19 dentro del territorio nacional.

Los recursos se destinarán a la aplicación de medidas de compensación social orientadas a los habitantes de la República, con énfasis en la población más vulnerable.

La propuesta establece que el Banco de Guatemala adquiera la deuda de la emisión de bonos del tesoro por Q11 mil millones.

De ese monto se creará un fondo de crédito de Q3 mil millones para capital de trabajo y para uso de las pequeñas y medianas empresas por medio del sistema bancario.

El segundo eje son las posibles suspensiones colectivas de los trabajadores que corren riesgos y la creación de un fondo familiar por Q2 mil millones que estaría siendo operado con el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS).

Se trata de un subsidio de Q2 mil para cada una de las 300 mil familias beneficiarias.

El tercer eje es apoyar al 70% de los hogares, que equivalen a 2.2 millones de familias, con un fondo de Q6 mil millones para dotarlos de ingresos para la compra de sus alimentos y servicios básicos. Esto es Q1 mil para cada familia.

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