De los más de 2 mil niños deportados, 853 viajaban acompañados y 1 mil 137 solos, indicó la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia de Honduras (Dinaf), que instó a los padres de familias a no arriesgar a los menores en “la difícil travesía” al intentar llegar a Estados Unidos de manera ilegal.
El 58% (1 mil 270) de los menores fueron deportados desde México, un 37% (810) de Estados Unidos, el 4.5% (99) de Guatemala y el 0.5% (11) de otros países, añadió.
Del total de niños retornados, 362 tienen edades comprendidas entre 0 y 5 años, 389 entre 6 y 11 años, y 1 mil 439 entre 12 y 17 años de edad, según la institución hondureña.
La migración de menores de edad en el pasado se consideraba parte o dependiente de la salida de adultos, pero en la actualidad las autoridades han identificado que los niños juegan un papel importante en el viaje, ya que “son colocados en el frente de batalla para cruzar las fronteras”, dijo Rosa Estrada, especialista de Dinaf.
Señaló que los riesgos que padecen las personas en su ruta hacia Estados Unidos se hacen “visibles de diferentes maneras”, en especial para los menores de edad, porque son los más vulnerables.
La experta indicó que los peligros durante el viaje están asociados a las condiciones climáticas y geográficas, abusos de autoridad y daños a su integridad física y emocional.
“Un viaje sin futuro que los coloca al filo del peligro” ya que pueden ser víctimas de extracción de órganos, explotación sexual comercial, trata de personas, pornografía infantil, esclavitud, tráfico de drogas, abuso sexual, extorsión, robo, secuestro, contagio del covid-19 y hasta la pérdida de la vida, subrayó.
Los menores emigrantes retornados son atendidos de acuerdo al Protocolo de Protección Inmediata, Repatriación, Recepción y Seguimiento de Niñas y Niños Migrantes en el Centro de Atención Belén, ubicado en la ciudad de San Pedro Sula, norte.
El Gobierno hondureño cerró sus fronteras terrestres y aéreas el 16 de marzo, cinco días después de haber hecho público los primeros dos casos de contagios de covid-19, que hasta ahora ha afectado a más de 91 mil personas y ha causado a muerte de 2 mil 604 pacientes en este país centroamericano.
Honduras contabilizó el año pasado 109 mil 185 deportados desde Estados Unidos, México y otros países, según cifras del Observatorio Consular y Migratorio del país.