El aumento de los municipios
Es el mismo modelo que se refleja a lo largo y ancho del país: la capital guatemalteca es el lugar donde se encuentran los principales servicios, lo que crea una emigración hacia la urbe y ello contribuye a aumentar los problemas derivados de ser la ciudad más grande del istmo centroamericano.
Existen algunas otras razones para que los habitantes de un área específica de algún municipio decidan separarse. Algunas son de tipo político: al crearse uno nuevo le corresponde el aporte constitucional que reciben todas las municipalidades, pero el centro de poder queda más cercano.
Por otra parte, el Gobierno tiene un beneficio momentáneo, al ser quien designa a las autoridades, ya que es el Ministerio de Gobernación el encargado de integrar una junta que nombrará al funcionario respectivo, aunque hasta ahora la tradición ha sido que ese cargo lo desempeña el presidente del comité que ha efectuado todas las gestiones administrativas, mientras en el próximo proceso electoral se designan a las nuevas autoridades.
Sin embargo, ese crecimiento tiene otras aristas. Por ejemplo, que los vecinos ya no quieren tributar a autoridades que no satisfacen necesidades de infraestructura y obras que mejoren la vida de una comunidad. Desean entonces manejar recursos de manera directa, con el fin de obtener esos beneficios en un menor tiempo.
En las cercanías de la capital, Ciudad San Cristóbal es un buen ejemplo. Tiene más de 20 mil habitantes, número necesario para buscar convertirse en un nuevo municipio. Es evidente, además, que los ingresos fiscales originados en esa área pueden ser cuantiosos y por ello determinantes para la Municipalidad de Mixco, aunque no cabe duda de que por el momento esa gestión no prosperará.
El riesgo de esta práctica es que se pueden dar muchas gestiones en aras de supuestas mejoras para el vecindario. Es un hecho que algunas áreas de un municipio subsidian a otras, y si las comunas se quedan sin posibilidad de obtener recursos suficientes ante la salida de quienes aportan, el camino está pavimentándose para aumentar los problemas sociales de toda una región. En el caso de nuevos municipios creados en lugares alejados de cabeceras departamentales, es claro que tienen grandes retos en su consolidación.
Tampoco se puede olvidar que como consecuencia de la autonomía municipal aplicada de manera oportunista y anómala, las comunas tienen una total discrecionalidad de gastos, a pesar de que existan síndicos y concejales. Allí se manifiesta la figura de alcaldes con ínfulas de monarcas absolutistas, como se ha manifestado en las alcaldías capitalina, mixqueña y villanovense.