POR LA LIBERTAD
Más sobre el etanol a la fuerza
A raíz de mi artículo publicado la semana pasada, Golazo: etanol a la fuerza, recibí varios comentarios y algunas aclaraciones. La primera aclaración es que esto se aprobó bajo el acuerdo gubernativo número 159-2023 y no como yo había indicado, el 153-2023. El objeto de dicho acuerdo es “desarrollar y normar los procedimientos de producción, almacenamiento, manejo, uso, transporte y comercialización de alcohol carburante y su mezcla”. Será obligatorio su uso.
' Un privilegio como este o las tarifas proteccionistas beneficia a unos pocos a costa del resto de la población.
Ramón Parellada
Un comentario de otra persona me decía que es molesto ver que grupos de presión siguen aprovechándose de situaciones en que los gobernantes, cual cómplices de esos grupos, otorgan privilegios a quienes se los piden. Son unos mercantilistas oportunistas. El gobierno no está para otorgar ningún privilegio a nadie. Está para garantizar un verdadero estado de Derecho en el que todos seamos iguales ante la ley. Un privilegio como este o las tarifas proteccionistas benefician a unos pocos a costa del resto de la población. Se utiliza el poder y la fuerza del gobierno. Unos ganan a costa de la pérdida de todos los demás habitantes del país. Es injusto.
También me mandaron un comentario que a mí me parece muy certero: “…llama la atención la pasividad, frente a este particular tema, por parte de los importadores y distribuidores de gasolinas y demás derivados del petróleo, cuyas calidades se aseguran de por sí, principalmente mediante la respectiva marca de los productos. No obstante, esta misma pasividad fue notoria en la opinión que tres años atrás vertiera el gerente de ventas de una de las marcas en el mercado nacional (Prensa Libre, 23 de octubre de 2020)”. Agrego que también me llama la atención la poca difusión que los medios periodísticos han hecho de esta noticia. Es curioso que la mayoría se han quedado muy callados con relación al tema, a pesar de que es una pérdida de nuestra libertad, libertad de escoger. Como que no cuestionamos nada y nos parece normal que nos fuercen a consumir etanol en la gasolina cuando hay opciones más económicas y mejores.
También recibí un comentario de un lector que me indicó lo siguiente: “Otro punto que debe considerarse, y que hasta donde he visto la ley no lo hace, es que no se puede utilizar en motores de dos tiempos (desbrozadoras, fumigadoras, motosierras y algunas motos).” En realidad hay muchos aspectos técnicos que no conozco a fondo. Mi argumento principal en contra de la ley es que nos obligan a usar el etanol en la gasolina a la fuerza. Como mencioné la semana pasada, si tan bueno es el etanol y tiene tantas ventajas, ¿por qué se debe obligar a utilizarlo?
Otro comentario recibido implica que “al analizar el ciclo de vida completo (incorporando por ejemplo la energía necesaria para producir y reparar la maquinaria agrícola, y la usada en el proceso de destilación y fermentación) el balance es negativo, es decir: consume más energía fósil que la renovable que produce. La deforestación y la disminución de tierra cultivada para alimentación (con la subsiguiente aparición del hambre) son otros de los grandes problemas que plantea el etanol. Un auto recorrerá de un 3% a un 4% de millas por galón menos si usa E10 y de un 4% a un 5% menos si usa E15 que si usara 100% gasolina”.
El Gobierno debe derogar dicho acuerdo gubernativo. No se puede ni debe imponer el consumo de algo a la fuerza, especialmente si ese algo hará más pobre a la población, con excepción de los que se verán favorecidos con este injusto privilegio mercantilista. Además, perderemos parte de nuestra libertad. Hoy nos fuerzan al etanol en la gasolina, ¿mañana qué será?